Madonna sabía que tenía que empezar a hacer algo que le gustara y que pudiera poner al servicio de los demás, que creara un impacto positivo en las personas y que ella fuera parte de ese proceso.
Debido a la pandemia, este odontólogo implementó varias medidas sanitarias para continuar con su labor, ya que debe pagar la universidad de su hijo, su casa y la renta de su clínica.