A priori y bajo una perspectiva simplista parece evidente que el Estado puede invertir con mucho mejor criterio los Q8.5 millones designados a una grasa burocrática que se sirve con la cuchara grande.
El Gobierno actual se valió del Acuerdo Gubernativo 16-2017, suscrito durante la administración del impresentable Jimmy Morales, la cual creó una Comisión estratégica “ad honórem” (integrada por un ministro y tres secretarios).