La última vez que lo vieron fue en el parqueo de un centro comercial, desde entonces su familia no sabe nada de él.
Desapareció como si la tierra se lo hubiera tragado, si lo has visto, llama a la familia que está triste sin él.
Carlos siempre se sintió atraído por las costumbres de Guatemala, sus colores y sabores, era un extraño vínculo.