Óscar Ortiz Barahona, corresponsal de Mi Gente Informa en Honduras
Un estudio reciente de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) reveló que, al menos un 53% de hogares hondureños vive bajo el umbral de pobreza extrema y un 70% es catalogado en el rubro de pobreza total.
Estas cifras, según destaca el estudio, tendrán que ser evaluadas por el Gobierno, empresa privada y demás sectores sociales, con el objetivo de empezar la reconstrucción de un Estado que ha sido saqueado y dejado prácticamente en la ruina.
Según el estudio de la UNAH, es papel de varios sectores públicos y privados intervenir a nivel nacional de manera eficiente, esto para evitar un mayor aumento de la pobreza en Honduras, de no cambiar la situación en la que se encuentra el país, se podrían incrementar los conflictos sociales, políticos, y además, seguirá la migración irregular hacia Estados Unidos.
Enfrentando una pandemia
Algo que ha contribuido a empeorar el problema de la pobreza en Honduras, es la pandemia del COVID-19, que ha dejado con menos oportunidades de trabajo a las personas y acentuado negativamente las condiciones sociales.
De acuerdo con economistas, este es un escenario propicio para forzar oleadas de migración, a menos que cambien las condiciones de vida y se incentive el empleo, se controle la violencia y se impulsen políticas públicas, pues en la actualidad lo que existe es un mal manejo en temas de salud, educación y seguridad.
Esta dura realidad de los hondureños limita las oportunidades de desarrollo para las futuras generaciones, lo que se traduce como retroceso social, político y económico.
Expertos opinan
La economista Cinthia Arteaga, opinó para Mi Gente Informa que la situación social y política en Honduras son condicionantes claves para los niveles de pobreza y esto lo respalda la investigación de la UNAH.
Honduras está atrapado en un bucle de pésimos gobiernos, lo que ha ocasionado que las condiciones económicas empeoren cada vez más, lo que para los expertos puede significar que el país centroamericano está rumbo a convertirse en un Estado fallido, como es el caso de Haití.
Hasta el momento no parece generarse un cambio, comentó Cinthia Arteaga, debido a que las condiciones en los últimos 10 años no han variado, incluso hay quienes creen que la pobreza está en aumento.
Por último, mencionó que debe de ser tarea de los socios internacionales y del gobierno de Honduras prestar especial atención al deterioro en las condiciones de vida de la población hondureña e impulsar una estrategia “exitosa” de vacunación contra el virus del Covid-19 para impulsar la reactivación económica, social y política.
Es necesario promover el emprendimiento individual y ampliar la cobertura de la infraestructura rural, volver más accesible el acceso a la educación virtual de calidad, con el fin de acortar el rezago provocado por la suspensión de las clases presenciales, reveló el informe.
Coincide con el índice Hanke’s
El índice de Hanke’s, que toma en cuenta las tasas de desempleo, inflación, préstamos bancarios y la variación porcentual del Producto Interno Bruto y estima el bienestar de los países por los valores de su economía, ubicó a Honduras como el país con más miseria de Centroamérica.