Sarita, una perrita mestiza que vivía en la calle, fue rescatada gracias a la labor de Ingrid García. Luego de permanecer en el refugio en donde albergan a todos los perros parecía que el hogar ideal para adoptarla había aparecido. Fue entregada a su nueva familia a las 2:00 p.m. y a las 5:00 p.m. escapó y a pesar de las búsquedas no apareció.
Esa es la historia que Ingrid recuerda de los 7 años que lleva rescatando a perritos de la calle. Su pasión nació cuando su hermana llevó a un canino a su casa y el cariño por él creció poco a poco. “En mi casa nunca hubo mascotas, hasta que mi hermana llevó al primero, ahí empezó mi pasión por ellos”, comenta.
Su labor inició hace 7 años y desde hace 3 se legalizó como Asociación Rescate y Cuidado Animal Guatemala. Actualmente, tiene un albergue en Mixco, en donde habitan 30 perros.
“La primera perrita que rescaté se llamaba Negrita, fue en la Colonia Florida, lamentablemente tenía heridas graves y debimos dormirla”, recuerda Ingrid.
La prioridad de su asociación es rescatar perros atropellados, heridos o enfermos que viven en la calle o que han abandonado. En total, dice que ha rescatado a un estimado de 400 caninos a los que ha dado cariño, un hogar, comida, agua y ha sanado sus heridas.
“Nosotros tenemos una alianza con Veterinaria San Cristóbal, que nos apoya, pero las personas particulares nos apoyan con los diferentes casos de las mascotas que rescatamos”, dice.
La tarea más difícil de su labor es conseguir hogares para las mascotas y ayuda para los tratamientos veterinarios. Los casos más comunes que se encuentran son: perros atropellados y con enfermedades como sarna o cáncer.
“Nuestro protocolo es rescatar y llevar a la veterinaria para que lo curen y traten. Si requiere de cirugía, lo ponemos en un lugar especial del albergue para que se pueda recuperar bien”, comenta.
Todos los perros que rescata son mestizos y permanecen en el albergue hasta que alguien los adopte, aunque algunos mueren de vejez, ya que no encuentran un hogar.
“Mensualmente, tenemos gastos de alquiler del lugar donde están los perritos, de agua, luz, más alimento en el que gastamos Q5 mil. Cuando no logramos suficientes donaciones debemos poner el dinero de nuestra bolsa”, relata.
Ingrid cuenta que su parte favorita de llevar a cabo la labor de rescate es cuando los caninos encuentran un hogar en donde los quieran y cuiden.
Uno de los casos más recientes es Bruce, que ahora disfruta con su nueva familia, en Estados Unidos. También, Lilly, otra perrita adoptada por una familia estadounidense, dos años atrás.
Si deseas apoyar esta causa puedes hacerlo por medio de la Asociación Rescate y Cuidado Animal Guatemala https://www.facebook.com/rescateycuidadoanimal/ y si quieres reportar algún caso, comunícate al 4240-4139, con Ingrid García.
Fotos: Facebook Ingrid García.