En estos tiempos de amor y paz comienzan a resonar en las calles las famosas posadas. Familias y amigos se reúnen con ilusión para compartir esta gran tradición, con adornos, colores, villancicos, ponche, tamales y mucho amor por todas partes. ¿Este año te tocó ser el anfitrión y no sabes qué hacer? ¡No te preocupes! Nosotros te damos unos tips.
¿Qué son las posadas y cuándo comienzan?
Son recreaciones de aquella escena bíblica en la que María y José salen huyendo de Nazaret y llegan a Belén, cuyo viaje les llevó 9 días. Las posadas comienzan el 16 de diciembre y terminan el 24 del mismo mes.
¿Qué elementos debo tomar en cuenta?
Invitaciones
Es importante que hagas invitaciones para tener un estimado de cuántas personas llegarán a la posada. Esto evitará que te falte espacio o comida, o que te sobre mucho. ¡No desperdicies!
Es preferible que en la invitación des a conocer si hay parqueo (para cuántos) o no disponible, para que las personas se organicen antes de llegar y no haya inconvenientes.
La dirección es un dato que debe estar completamente claro en la invitación, mejor aún si se puede colocar un pequeño mapa como referencia.
Por último, no olvides enviarla con varios días de anticipación, así los invitados pueden organizar bien su llegada.
El inicio
Al inicio se acostumbra a cantar el villancico del peregrinar de María y José, por lo que debes asegurarte de organizar dos grupos: uno para que cante afuera para pedir posada y el otro, para que se quede adentro del lugar. Es importante mencionar que todos deben llevar velas, las cuales deben permanecer encendidas hasta que ingresen todos.
Es indispensable que le repartas a cada persona la letra del villancico que van a entonar, porque en varios casos no todos se saben la canción a perfección.
La piñata
Probablemente esta sea la parte más esperada en las posadas, ya que es un momento para divertirse. Aunque no en todas se quiebra una, esto depende de cada anfitrión. Si a ti te gusta, debes saber primero el significado de quebrar una en la actividad.
Sabías que…
Las piñatas simbolizan el pecado que el ser humano debe evitar. Normalmente tienen picos, los cuales representan los pecados capitales. El objetivo es golpearla hasta que las virtudes (los dulces con los que se rellenó) salgan.
En esta parte puedes repartir a los invitados bolsas de tela para que puedan recoger sus dulces y no se queden algunos tirados en el suelo.
La esperada cena
Muchas son las opciones que tienes para poder servir a las personas que llegaron a tu posada:
- Tamales
- Paches
- Tacos de canasta
- Chuchitos
- Tostadas, etcétera.
Cualquiera de estas comidas tradicionales de la época pueden darle un toque especial a tu posada. Sin embargo, hay algo que no puede faltar sin importar qué des de comer… el ponche. ¡Que no falte en tu cena!
Estos son los elementos principales que no pueden faltar en tu posada. Pero recuerda que lo más importante es la actitud que tengas al recibirla, ya que con una sonrisa y amabilidad todas las personas que lleguen a tu hogar se sentirán acogidos.
¡Felices fiestas y que tu posada sea para recordar!