Muchos le temen, mientras otros la adoran. La Niña Blanca, como le dicen de cariño, cada vez posee más feligreses en todo el mundo. Mantiene una incertidumbre en los no creyentes y fe en quienes cada día le piden con gran devoción un milagro.
No es normal hablar de la Santa Muerte, ya que al oír el nombre a algunos se les pone la piel de gallina. Muchos lo asocian con la maldad, brujería o con personas que están involucradas en actos delictivos; también creen que son los únicos que poseen una gran devoción hacia la Chiquita.
Cierto o no, la Santa Muerte también es venerada por quienes deseen obtener un favor o milagro. A principio de la década de los sesenta, se empezaron a escuchar historias sobre las extrañas apariciones de la muerte en el estado de Veracruz, México
Cuenta la leyenda que a un chamán veracruzano la muerte lo visitó mientras dormía. Indicó que no sintió miedo, sino al contrario, mucha paz. Ella le ordenó que difundiera su culto por todo México, porque la consideraba su patria y luego al resto de América.
Guatemala no ha sido la excepción, ya que muchas personas cada vez se acercan a ella, con respeto y amor la veneran en un altar, en el cual sus plegarias serán escuchadas. “Yo la conocí en un viaje a México y al principio me dio miedo. Tenemos una mala percepción al conocerla”, menciona Alan.
Para Alan, la Santa Muerte es alguien que escucha, no discrimina entre personas buenas o malas, siempre está para ti. “Es cierto que delincuentes, narcos, entre otros, la veneran y la utilizan para actos delictivos. Ella no discrimina a nadie. También hace milagros a los buenos”, cuenta Alan.
“La muerte es justa”, frase que los devotos tienen presente. Si le prometes algo debes cumplirlo. “Cuando tú pides puedes ofrecerle algo sencillo”. “Algunos creen que uno va a hacer sacrificios satánicos o derramar sangre para que la Chiquita haga su trabajo y no es así”, dice Alan.
En un pequeño altar escondido detrás de su guardarropa está una escultura de la Niña Blanca de un aspecto cadavérico y alrededor sus flores favoritas. “Hay de varios colores, cada una tiene un propósito, la mía es de hueso, ideal para tenerla en casa o negocio; sirve para la paz, armonía y estabilidad”. “Yo le tengo flores porque cada vez que pido ese es mi ofrecimiento”, relata Alan.
Ante los ojos de los curiosos su poder es débil, pero su fuerza radica en la fe y el secreto. “No es normal invitar a alguien que pase a ver tu altar ni mucho menos decir que uno es devoto, ya que en nuestra sociedad es mal visto, a pesar de que ya hay muchas personas que comparten esta fe”, expresa Alan.
“Cada persona le da su significado”.
Ya sea por los sueños, la atracción espiritual, las personas se acercan más para venerar a la Santísima Muerte. “Hay historias de historias, la mía inició en un viaje a México, cuando visité un santuario, me atrajo. Al volver a Guatemala la curiosidad era más fuerte hasta que un compañero que ya la veneraba mencionó que ella me estaba buscando”. “Al principio fue impactante, investigué más y pude notar que es buena, ya que no necesitas matar para que se te cumpla algún favor, pero siempre se debe respetarla y no jugar”, indica Alan.
Un significado que para la Iglesia católica es considerada pagano y una fe que no existe. “En nuestra sociedad es muy inusual hablar de esto, en México algunos policías la veneran y elaboran grandes altares”. “En Guatemala existen sitios que son secretos, pero la mayoría la mantenemos en nuestros hogares, negocios o lugares especiales”, menciona Alan.
Muchos tienen miedo o fe. “Es como los creyentes de otras religiones, como los católicos que tienen sus santos y nosotros a nuestra Chiquita. Al final, cada quien cree en lo que le hace sentir mejor“, relata Alan.
Un significado que cada vez toma más fuerza en los creyentes. “Yo soy devoto, pero eso no significa que sea una mala persona. La fe no es un juego, ella es real y debes respetarla”. “Uno cree lo que quiere creer, lamentablemente aquí en Guatemala los delincuentes son los que más creen”.
En Guatemala
De igual manera, las redes sociales son parte de los feligreses. En Facebook se puede encontrar a personas que dicen ayudarte en distintos aspectos. Tal es el caso de la página El Templo de La Santa Muerte Guatemala con una comunidad de 321 followers. Se dedican a dar a conocer el trabajo de la Santísima Muerte. “Centro dedicado a trabajos espirituales con la Santa Muerte, regreso del ser amado, trabajos para ser amado, dinero, viajes, retiro de magia negra”, se puede leer en la página.
Según se conoce en Guatemala existen templos cerrados reconocidos internacionalmente. El primero se encuentra en la colonia La Florida (zona 19), otro en San Andrés Itzapa (Chimaltenango) y en zona 10 de Mixco. “Los templos de aquí no son como en México, abiertos a todo el público. Aquí son privados por la misma cultura de nuestra sociedad”. “Hay varios altares por todo el país, en casas o lugares escondidos”, indica Alan.
Cada vez más en el país, la Santísima Muerte se encuentra en más hogares guatemaltecos. Unos piden por amor, paz, trabajo o un milagro que la Niña Blanca les conceda. La fe lleva a unos a pedir su manto protector y a otros simplemente los aleja.