Juan Ramírez, a quien sus amigos le llaman de cariño Juanito, es un hombre, padre y esposo ejemplar. A sus 15 años empezó a trabajar en sistemas eléctricos y después de un tiempo se convirtió en eléctrico industrial, logrando trabajar en una empresa de bombas de agua.
En 2006 la vida de la familia Ramírez da un giro inesperado: Juanito sufrió de una trombosis mesentérica, que consiste en un coágulo que bloquea el flujo de sangre en una vena mesentérica; está provocó un daño intestinal en él, dañando 60 cm del intestino delgado. La recuperación fue larga, ya que tuvieron que esperar seis meses para que el medicamento estuviera controlado y no causara un derrame de sangre en algún lugar del cuerpo.
Juanito, luego de un tiempo continúo su vida normal, pero en 2018 se volvió a complicar su estado de salud. Por medio de una resonancia computarizada se detectó la presencia de trombos en la vena mesentérica superior y en la vena porta. Esta última alimenta el flujo sanguíneo al hígado, causando lesiones en la estructura de la misma.
Ha sido un hombre apartado de vicios, drogas, cigarros y alcohol. Es muy lamentable y triste lo que le está sucediendo”, dijo un amigo de Juanito.
Se empezó a tratar con anticoagulantes, sacándolo del peligro. Sin embargo, a principios de 2019, nuevamente volvió aparecer una trombosis mesentérica y porta. Hoy se encuentra internado y sobreviviendo día con día, ya que el aparato que necesitan colocarle en el hígado tiene un costo de Q75 mil, más la cirugía, medicamentos, entre otros insumos, haciendo un aproximado de Q200 mil. Esta intervención no la realizan en Guatemala, por lo que a Juanito lo necesitan llevar a México o Florida.
Su esposa e hijos han realizado distintas actividades para recaudar el dinero, aunque todavía les hace falta mucho para poder lograr la meta. Si deseas ayudar y unirte a esta noble causa, puedes depositar a la cuenta No. 3237010604, a nombre de Juan Arnoldo Ramírez Lara, en Banrural.