Según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, cerca del 38 por ciento de las mujeres recibirán un diagnóstico de cáncer de seno en su vida. En este porcentaje no solo serán afectadas quienes están en los 40 años, sino también las más jóvenes.
Aunque no hay una causa exacta del porqué el porcentaje de cáncer de seno en mujeres menores de 30 años. Se ha demostrado que el 10 por ciento de estos casos puede deberse específicamente a mutaciones genéticas. Asimismo, ser hereditario, por lo cual se vuelve más propensa a ser diagnosticada.
Puede que en el transcurso de tu vida experimentes cambios en los senos, pero cuando observes ciertas señales debes estar atenta porque pueden ser mortales. La doctora, Delia Constanza Guaqueta, explica que el cáncer de seno se ha vuelto una enfermedad crónica y de mayor riesgo en pacientes más jóvenes. Las razones son variadas, entre ellas, la mala alimentación, el estilo de vida sedentario, insalubre, además del consumo de tabaco.
Actualmente, se ha detectado que las personas con un alto grado de sedentarismo tienen un mayor riesgo de padecer cáncer. Hay una correlación directa con el porcentaje de grasa en el cuerpo con la enfermedad, por lo cual es recomendable mantener un peso estable y saludable.
Los mitos
Solo las mujeres con antecedentes familiares tienen riesgo de padecerlo.
En realidad, 10 por ciento de los diagnósticos son hereditarios, mientras que el 85 por ciento es esporádico y cualquier mujer puede estar en riesgo.
El cáncer de seno no es doloroso.
La presencia o ausencia de malestar no determina el origen de un tumor ni la probabilidad que sea benigno o maligno.
El cáncer de mama solo lo padecen las mujeres.
Pero, un 3 por ciento de hombres pueden presentar los mismos síntomas y pasar por tratamientos como la quimioterapia.
LA PREVENCIÓN ES EL PRIMER PASO
No hay un método para prevenir el cáncer de seno, pero sí existen medidas que pueden ayudarte a disminuir su riesgo y mantenerlo bajo control. En la parte quirúrgica, se está evitando realizar las mastectomías, ya que hace 30 años eran severas y agresivas. Con el tiempo, los expertos han visto la necesidad de realizar procedimientos que preserven más delicadamente la anatomía de la mujer.
Se ha descubierto que un buen método es la lumpectomía (quitar una parte pequeña del seno donde antes estaba el cáncer). Esto para disminuir la extensión de la cirugía, ya que es una parte importante no solo física, sino que psicológicamente preservarlo.
La mamografía sigue siendo la técnica número uno para el diagnóstico temprano, pero ahora existe la tridimensional que es computarizada y permite ver más a detalle el tejido mamario. Guatemala ya cuenta con este examen digital y tridimensional.
El cáncer de seno sí duele y en muchos casos es ignorado. Es un dolor sordo, al cual se debe prestar atención porque puede ser la diferencia entre un diagnóstico temprano y la muerte.
Fuentes: Holy Cross Hospital, Dra. Delia Constanza Guaqueta del Holy Cross Medical Group. www.cancer.gov