“Mi nombre es Diego Martínez, soy centroamericano, nacido en Guatemala, coordinador Nacional de la Red Mundial de Oración del Papa en Guatemala. Estar frente a usted es una gran bendición”. Así empezó Diego Martínez, el joven guatemalteco que se presentó ante el Papa en la celebración de los 175 años de la Red Mundial de Oración del Papa y la celebración de los 10 años del proceso de su recreación como una obra pontificia.
Martínez es el coordinador de obra Pontificia en Guatemala. Desde joven se ha involucrado en la iglesia y en las organizaciones para trabajar por la paz.
“Agradezco por haber puesto su mirada en Guatemala, país lleno de gente cálida, cultura y variedad natural”, señaló Martínez.
En el Encuentro Internacional de la Red Mundial de Oración del Papa asistieron 52 delegaciones de los cinco continentes y más de 5 mil participantes. En el mismo, también se recordó sobre los proyectos de El Video del Papa y Click To Pray, que tienen la misión de movilizar a los católicos por la oración y la acción, ante los desafíos de la humanidad y la misión de la Iglesia.
“Tomar la misión fue un gran desafío, por los conflictos que atraviesa mi país”, expresó Martínez.
En este marco junto a la Red Mundial de Oración del Papa en Guatemala y la Asociación Yo Quiero la Paz del Mundo se unieron para lanzar de manera oficial la siembra del Árbol de la Paz. Esto, con el propósito de llevar un mensaje de paz y esperanza para fortalecer los valores y cuidados del medioambiente en Guatemala.
“Mi familia, amigos, religiosos y medios de comunicación, hemos despertado inquietud para trabajar en unión, para llevar la misión a todo el país. El impacto fue tanto que veo la necesidad de transmitir el video del Papa a las comunidades, en sus propios idiomas mayas”, dijo Martínez.
Este es una actividad apoyada por Xprésat Guate, Al Vaticano X Guate y la Fundación Simbiosis. El proyecto de la siembra del Árbol de la Paz se realizará en instituciones, iglesias, centros educativos, entre otros. “La siembra del Árbol de la Paz es un proyecto en el que buscamos tener cercanía con todos para el cuidado de la casa común, nuestro planeta; a su vez, el fortalecimiento de los valores y la oración”, expresó Martínez.
“Siempre soñé trabajar con el Papa. Nada se mueve sin la voluntad de Dios. Me siento feliz”.
