La economía personal y familiar se ha visto afectada durante las últimas semanas, así que lo principal es que no hagas compras de pánico o gastos que no tenías planeados, ya que, aunque sea por un gasto personal, lo mejor es que aprendas a administrar bien cada recurso disponible para la economía doméstica.
En ese sentido, lo primero que debes hacer es revisar el presupuesto que tienes asignado para tu hogar sin suponer en un endeudamiento. Revisa lo que puedas pagar ahora y lo que en realidad no sea prioridad o pueda esperar para después.
Otra es modular el ahorro y si tienes dinero que hayas destinado para emergencias, es mejor que separes la parte dedicada al corto plazo como la alimentación y si tienes que hacer compras en el supermercado, realiza una lista con anticipación de alimentos que realmente valgan la pena y sean esenciales en la despensa y apégate a ella. A largo plazo, un fondo de contingencia para las deudas o pagos del hogar.
Evita hacer gastos superfluos como prescindir de algunos servicios que impliquen pago como el gimnasio, la comida rápida o algunos gustos como las bebidas carbonatadas o alcohólicas que requieren que gastes.
Si tienes la necesidad de hacer algún ajuste, hazlo de la manera más sensata, meditada y, sobre todo, sin entrar en pánico para no tener pérdidas. Aunque es difícil pensar en todo lo que sucede a la vez, siempre debes analizar todo con perspectiva y saber los cambios que se vienen en el futuro.
Y ojo, es importante que si estás en casa día tras día junto a tu familia, no acaparar todos los alimentos, servicios como el teléfono de casa u otros aparatos que consuman exceso de energía y otros, ya que estos también repercutirán en más gastos.
Fuente: El Universal. Financer. Innovate Summit. Resurgir, Congreso Virtual de Finanzas Personales.