En Guatemala existe un amplio mercado de productos hechos a mano. Estas son algunas de las historias, detrás de estas empresas que buscan en la Feria Regional New World Crafts, llegar a un mercado internacional. El propósito no es solo que se consuman sus productos, sino también que abra las puertas para conocer la amplia cultura del país y sus rostros detrás de este trabajo manual.
Flor de Algodón
La Asociación Flor de Algodón nació con el objetivo de ayudar a mejorar los ingresos de muchas mujeres con la elaboración y venta de sus productos artesanales como los güipiles, manteles, chalinas, entre otros. Esto con el objetivo de presentar su trabajo.
María Ana ha tejido durante 30 años y, gracias a esta oportunidad, le brindó estudios a sus hijos y así mejoró su calidad de vida. Así como ella, hay otras mujeres y hombres de la etnia maya achí, de la Comunidad de Chuaperol Rabinal, Baja Verapaz, quienes se preparan por la mañana, dan gracias al creador y ponen el trabajo en sus manos. Agregan esa espiritualidad a su creación y lo hacen más especial para los compradores. “Nos ha ayudado a mantener a nuestra familia y a que mi hijos tengan una carrera y puedan vivir mejor que nosotros”, cuenta.
Una historia de cambio
Wakami es conocida por sus pulseras elaboradas de hilos de colores, pero con un toque moderno y a la moda. Sin embargo, este año se han dado a la tarea de innovar para seguir siendo una plataforma para la formación de muchas comunidades. Han incluido en sus productos joyería de plata, ropa elaborada de manta teñida con tintes naturales y tejidos a mano, así como bolsas hechas de playeras recuperadas, siempre con el toque artesanal.
La parte más importante de Wakami es que capacita para la producción a 500 mujeres de alrededor de 20 comunidades en el interior de Guatemala, generando proyectos de inversiones inteligentes. Esto, para que ellas puedan manejar su propio dinero e invertirlo en la educación de sus hijos, así como mejorar su calidad de vida.
“Ha sido un proceso lindo de escuchar las historias de ellas y saber que cambiamos vidas erradicando el machismo y empoderando a las mujeres. Enfatizarles que son capaces de manejar una empresa y negocio”, cuenta Wendy Hernández, diseñadora de Wakami.
“Son más de 100 colecciones de productos hechos a mano, con piezas icónicas representativas de Guatemala y la región, incluyendo moda de alta costura , elaborados con las tendencias del mercado, entre ellas “ecofriendly”. Lucía Villavicencio, Presidente de la Comisión Hecho a Mano de Agexport.
Generando amor y rompiendo tabúEs
Shanú Bags Guatemala nace con el propósito de ser una marca que lleve un mensaje. El nombre toma inspiración de una flor de la Biblia, la Rosa de Sarón, que su característica principal es que nace en el desierto, que a pesar de cualquier adversidad es fuerte y hermosa, por lo que siempre renace. Así es este grupo de 22 mujeres de distintas comunidades de Jalapa, las cuales realizan bolsas de calidad tanto para hombres como para mujeres. De las ventas del producto se consiguen becas para las niñas de estas comunidades para que puedan seguir con sus estudios. “Estamos generando bastante trabajo y amistades, nos hemos vuelto una gran familia”, cuenta Natalia Urrutia, dirigente de este proyecto.
También con el propósito de incluir a los hombres en proyectos de inclusión y erradicar la violencia contra la mujer, entre su marca también realizan una línea especial para ellos. Esta iniciativa incluye a los artesanos del lugar, lo cual les ha cambiando la vida, al generar trabajo y amor entre la comunidad. Asimismo, ha roto los tabúes de explotación para dirigirlo a un comercio justo e igualitario.
Artesanos con discapacidad
En el 2006, la Asociación de Padre y Amigo de Personas con Discapacidad de Santiago, Atitlán, ADISA, inició un programa de formación para jóvenes con discapacidad, para generar ingresos con los productos realizados con material reciclado. Todo lo que vende es hecho por personas con discapacidad y dependiendo de la venta que realicen es el tipo de ingresos con los que cuentan. Siempre están en la búsqueda de ampliar el negocio y tener para ellos un empleo digno y no de caridad.
Uno de ellos es Antonio Cua Mendoza, quien hace trabajos reciclados desde hace seis años, como bolsas y aretes hechos de papel. “Busco más mercado para mis productos y que pueda tener más trabajo para no depender de nadie. Me gusta trabajar y hacer muchas cosas”, relata Antonio.
Fuente: AGEXPORT www.export.com.gt
Fotos: Osman Velásquez