Durante las décadas de los 70 y 80, el departamento de Huehuetenango también sufrió las consecuencias mortales que trajo el Conflicto Armado Interno. Muchas familias se desintegraron con la muerte de los padres de familia o la migración que se dio hacia México.
Las mujeres quedaron viudas y, junto a madres solteras, tampoco tenían una fuente de ingresos. Buscaron maneras de sobrevivir solas y sin capacitación alguna. Durante ese tiempo, nació la Asociación de Cooperación al Desarrollo Integral de Huehuetenango (ACODIHUE). “Hacíamos convocatorias y mirábamos que solo llegaban mujeres. Nos dimos cuenta que eran madres solteras y viudas”, comentó Carlos Herrera, representante de la Asociación, que cuenta con diversos productos que benefician al desarrollo de las comunidades del departamento.
Ser parte de un proyecto de la asociación fue la solución para cientos de familias desintegradas. Más de 1 mil personas son ahora productores certificados de café y miel gracias al proyecto. El 80 por ciento de los productores son mujeres y 20 por ciento son hombres de todos los rincones de Huehuetenango. Entre los productos que la asociación apoya y comercializa está el café “I’xcapeh”, el café de la mujer en el idioma maya Popti’.
Características:- Café de tierras altas.
- Estrictamente duro.
- Cumple normas de responsabilidad social, ambiental, económica y de calidad.
- Café con acidez intensa, cuerpo cremoso, con notas cítricas, afrutadas y achocolatadas.
Este café es “único y de gran potencial comercial”. Las mujeres se encargan desde la siembra hasta la cosecha. “Ellas hacen todo el trabajo”, comentó Herrera. El Café de la Mujer es producido por pobladores de distintos grupos lingüísticos y culturales de la región como k’iché’, awakateka, q’anjoba’al y mujeres mestizas.
Las ventas del café sirven para apoyar el crecimiento de las comunidades del departamento. Además, es exportado a Estados Unidos, Europa y recientemente, a Asia. “Miramos cómo las mujeres han crecido, son caficultoras empoderadas y, ahora, ya existe un relevo generacional”, mencionó Herrera.
Lucía Silvestre Montejo, presidenta de la ACODIHUE, cuenta que antes, los esposos decidían qué comprar con los ingresos de las ventas. “Queremos que la mujer tenga sus propios recursos económicos y ellas mismas administren sus ingresos para no depender de nadie”, comentó Montejo.
Certificaciones:- Comercio Justo
- Con Manos de Mujer
- Orgánico
Estas mujeres encontraron la forma de sacar adelante a su familia cargando costales de café, sembrándolo y empacándolo. “Cada día avanzamos más aportándole más a la sostenibilidad de nuestros pueblos”, finalizó Herrera. Las caficultoras han mejorado su nivel económico, pero, más importante, su conocimiento sobre prácticas agrícolas y de producción las saca del promedio en cuanto a trabajo en la región.
Durante el primer trimestre del 2018, las exportaciones guatemaltecas sumaron US$2 mil 859.9 millones, según datos de la Asociación de Exportadores de Guatemala (Agexport). El café, junto al azúcar, el cardamomo y los textiles, son los principales productos que el país comercializa en lugares como Centroamérica, México y Estados Unidos.
Recientemente, la ACODIHUE exhibió sus productos en la última edición de Manufexport, un evento en donde las pequeñas y medianas empresas se presentan a posibles compradores y mercados. Puedes encontrar el café en la presentación de bolsa laminada de 400 gramos en tiendas selectas y la sede central de la Agexport.
Fotos: Carlos Herrera, Elena Gaytán y ACODIHUE.