Hace seis años, Ezequiel Quinteros comenzó con un negocio propio de refacciones. Vendía panes con pollo, tamales, molletes y muchos platos para poder estudiar y obtener la licenciatura de Psicología Clínica en la sede de la Universidad Mariano Gálvez de Chiquimula.
Donde trabajaba antes, no hubo oportunidad para seguir estudiando, pero Ezequiel quería superarse. El negocio funcionaba a través de pedidos en Facebook y cada vez era más popular. “Gracias a Dios a la gente le gustó cómo cocinaba. Es un trabajo muy duro y cansado, pero tenía la meta: cumplir mi sueño de graduarme”, comentó Quinteros.
El joven universitario necesitaba reunir aproximadamente Q3 mil para el pago del acto de graduación y otros gastos personales como transporte y comida. Así surgió la idea de realizar una “venta masiva” de tamales. Ezequiel publicó el anuncio en sus redes sociales para que sus amigos y conocidos compraran el sábado 8 de septiembre en Chiquimula.
“Yo no contaba con ese dinero, pero mis compañeros ya tenían fecha de graduación y no quería quedarme atrás”. – Ezequiel Quinteros.
Para sorpresa de Ezequiel, la respuesta fue positiva y masiva. Los medios locales ayudaron a difundir la historia y la publicación se hizo viral. “La venta fue un éxito y qué bendición ver cómo las personas venían incluso con la lluvia a traer sus tamales”, expresó Quinteros. Su meta eran 500 tamales, pero vendió 960.
Terminar una carrera universitaria representa una satisfacción para los alumnos. Aunque, muchas veces, las personas logran culminar sus estudios con ayuda de becas, casi siempre son los padres de familia o los mismos estudiantes los que costean.
Ezequiel cuenta que otros compañeros también han tenido dificultad para realizar sus últimos pagos, incluso, para pagar las mensualidades de la carrera. Algunos recurren a préstamos a bancos, prestamistas, familiares y amigos para sufragar los gastos.
Todos sueñan con el día en que por fin podrán tirar su birrete al aire y tomarse una foto con su toga y el título en mano. Sin embargo, las graduaciones no son gratis y, para muchos, como para Ezequiel es un gasto mayor.
Estas son las cuotas que se manejan en algunas universidades y facultades del país.
Universidad Francisco Marroquín:
Lo máximo que un graduando puede pagar, de acuerdo al tarifario disponible en la página de la universidad, es de Q3 mil 150 por derecho de graduación. Esto incluye 25 invitaciones por persona.
Universidad Mariano Gálvez:
El pago correspondiente al acto de graduación es de Q1 mil 800, según información disponible en el sitio oficial de la universidad.
Universidad de San Carlos de Guatemala:
Para obtener el grado de licenciatura, el derecho a examen general público tiene un costo de Q250. La impresión y registro del título cuesta Q115. Además, el alquiler de la toga para el graduando tiene un precio de Q50 y Q70 para los padrinos, según información de la Facultad de Ciencias Económicas.
Universidad del Istmo:
La cuota por gastos de graduación es de Q1 mil 300, aproximadamente. Esta incluye 10 invitaciones por persona, alquiler de toga y tramitación de título original.
Los universitarios en cifras
El acceso a una educación superior en Guatemala todavía sigue siendo una meta inalcanzable para muchos. Pero para quienes tienen la oportunidad de estudiar en la universidad, las opciones se dividen y entran a jugar el precio, la distancia y la variedad de carreras.
Así se distribuye la población universitaria en el país:
Un futuro prometedor
Ezequiel cancelará el último pago y su graduación se realizará el 7 de noviembre. “Todavía no puedo creer que esto me haya sucedido, para mí es algo inolvidable”, dijo el joven. A partir de ahora, Quinteros continuará con su negocio de comida, también quiere conseguir un empleo relacionado con su profesión.
“Ya tengo meses de asistir voluntariamente a una organización en Camotán, Chiquimula, para ofrecer mis servicios, adquirir experiencia y prepararme para un trabajo”, finalizó el joven. Gracias al esfuerzo y talento culinario logró cumplir un sueño que parece imposible para gran parte de los guatemaltecos: graduarse de la universidad.
Relatoon: Gabriela Soto, Familia Desarrollo Población (FADEP).
Fotos: Ezequiel Quinteros.