Con más de 30 años estudiando la realidad política y económica de Guatemala, Manuel Villacorta participa por primera vez en un proceso electoral como candidato a la presidencia, con el partido político Movimiento Winaq.
“Siempre tuve el deseo de intervenir en política, pero no como un deseo latente. La debacle económica, ambiental, política y social a la que llegamos me convenció para participar”, comentó.
Villacorta es licenciado en ciencia política egresado de la Universidad de San Carlos de Guatemala. También, posee un doctorado en sociología política por la Universidad Pontificia de Salamanca, en España.
Se ha dedicado al análisis político en los medios de comunicación, así como a columnista en los periódicos nacionales e internacionales.
Durante 1999 y 2000 desempeñó el cargo de embajador de Guatemala en Israel. También, ha sido docente universitario y consultor internacional en los temas de derechos humanos, migración y política.
Cuatro partidos le ofrecieron la candidatura, pero luego de una serie de reuniones con el Comité Ejecutivo de Winaq, aceptó ser el presidenciable junto a Liliana Hernández como vicepresidenciable.
“Es un partido del pueblo y de gente muy tolerante, comprometido con la justicia social. No me explico cómo sucedió, es hacer política”, agregó.
Pobreza y empleo, los ejes de su plan
Los ejes fundamentales del plan de trabajo 2020-13 van dirigidos al impulso de una política de desarrollo socioeconómico para combatir la pobreza y generar empleo.
“El 13 es un número místico en la cosmología maya que significa optimismo, volver a nacer”, explicó el candidato.
De llegar al Ejecutivo impulsaría una reforma del Estado que incluye una reforma fiscal. “Necesitamos recursos para hacer funcionar el Estado y cumplir lo que ofrecemos”, comentó.
El segundo eje se centraría en la infraestructura. Para el partido, ninguna política pública funcionará si no existe infraestructura como carreteras de acceso, caminos o una infraestructura política.
Las inversiones internas y externas también cumplen un papel fundamental en el plan. Para Villacorta, estas generan empleo, producción, consumo e impuestos para activar la economía.
“No somos enemigos de la inversión. Las apoyaremos siempre que sean inversiones respetuosas, que se paguen los impuestos y los salarios justos a los trabajadores”, mencionó.
“A un campesino que está sufriendo no podemos comprarlo con una lámina, eso solo lo hace la partidocracia corrupta que ya todos conocen”, comentó.
CICIG, ¿sí o no?
En cuanto al retorno de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), Villacorta mencionó que el “sistema de justicia es un caos y que no podemos solos”.
El binomio de Winaq recientemente se reunió con el comisionado Iván Velásquez para conversar sobre el caso de Guatemala.
“Necesitamos a la CICIG y lamentamos el acoso que hubo hacia ella. Al tomar posesión, inmediatamente contactaremos con Naciones Unidas para reformular un nuevo convenio. La CICIG retornará y más fuerte”, comentó.
Seguridad
Para combatir la delincuencia común, Villacorta propone llevar empleo, educación, cultura y recreación a las áreas más peligrosas. “Se ha visto en los países y lugares de Estados Unidos, los jóvenes tienen una salida que no sea la violencia”, agregó.
En cuanto al crimen organizado, como las mafias y el narcotráfico, plantea el fortalecimiento de la Policía Nacional Civil (PNC) con distintas unidades y fuerzas de tareas.
“Una de las funciones del Ejército es este combate y fusionarse con la PNC para realizar un trabajo científico y profesional”, enfatizó.
Salud
Su plan se enfoca en la salud preventiva, también a la atención de las personas enfermas con unidades móviles que patrullen el país con jornadas médicas.
“Queremos ampliar la red de centros de salud y que cada departamento tenga su propio hospital. Vamos a tomar en cuenta la distribución geográfica y demográfica de cada lugar”, indicó.
Para Villacorta, la salud es “una de las minas de la corrupción”. Es por ello, que fomentará la compra directa entre el gobierno y las farmacéuticas sin intermediarios y con supervisión de entes internacionales como la Organización Mundial de la Salud.
El sueño de unir cultura y turismo
Villacorta expresó que todos los ministerios son importantes, sin embargo, hay secretarías y viceministerios que son “tonteras” y hay que ajustarlos.
“Soñamos con un Ministerio de Cultura y TurismoMinisterio de Educación”, agregó.
El candidato dijo que contará con apoyo de la cooperación internacional en materia de seguridad y protección de sitios arqueológicos y naturales. “Tenemos el 80 por ciento de los vestigios de comunidades mayas, eso debemos explotarlo”, mencionó.
Además, de ser presidente, apoyaría a los jóvenes con los proyectos de emprendedurismo y turismo, que brinden empleo y beneficien al país.
La gran sorpresa
Villacorta ha pasado los últimos meses viajando por el país entre saludos, felicitaciones e invitaciones a tomar un atol de parte de los guatemaltecos.
“En la capital no se tiene idea de los problemas reales. Se dejan llevar por encuestas falsas con capital perverso”.
Afirmó que el partido tiene una alianza muy sólida con el Comité Campesino del Altiplano, gente positiva de la diversidad sexual, grandes cooperativas y radios comunitarias.
“La sorpresa va a venir del interior. El 17 de junio se habrán dado cuenta de lo grande que es el Partido Winaq”, mencionó.
Una declaración controversial
Un tuit reciente de Emisoras Unidas mencionó que en una entrevista, Liliana Hernández dijo que “de ser electos, apoyarían al gobierno de Nicolás Maduro, en Venezuela”.
Villacorta aclaró que se trató de una “emboscada” por parte del medio y el periodista. “Fue un acoso, cinco veces le preguntó lo mismo. Lo que dijo fue: Somos respetuosos de la soberanía de los pueblos”.
En ese mismo hilo, el medio publicó que Hernández dijo que “la invasión de fincas es recuperación de tierra”, a lo que Villacorta aclaró que se refería a la recuperación de tierras invadidas ilegalmente por el narcotráfico y los empresarios.
“Fue una acción perversa que no esperaba de esa radio ni del periodista”, lamentó.
Fuera de la política
Antes de la política, Manuel dedicaba su vida a trabajar en las consultorías y columnas de prensa, así como compartir con sus amigos.
Practica las artes marciales y disfruta del motociclismo. El ajedrez es su pasión y también le gusta leer.
“Mis hijas viven fuera del país. Yo regresé con el estatus de residente de Estados Unidos y decidí quedarme en Guatemala, luchando por mi país”, comentó.
Debido a su experiencia como catedrático, Villacorta considera a los jóvenes como “su pasión”.
“La juventud es lo más valioso. Esta generación pegó un brinco; no vende ni hipoteca su libertad. Le está haciendo la lucha a estos partidos corruptos. Es una generación despierta y muy inteligente”, dijo.
Recalcó que el 80 por ciento de los afiliados a Winaq son jóvenes profesionales y comprometidos. “Los jóvenes, los indígenas y las mujeres son las esperanzas para este país”, finalizó.
Fotos: Manuel Villacorta, Relato.