Mujer empoderada conoce sus derechos y los hace valer.
La ley establece que el matrimonio se funda en la igualdad de derechos y obligaciones entre los cónyuges. Más allá de la emoción de la boda, el vestido y la fiesta, las mujeres debemos entender que el matrimonio implica una unión legal entre un hombre y una mujer y que el tema económico se encuentra íntimamente vinculado, más ahora que las mujeres jugamos un papel importante en la economía familiar.
Hay que tomar en cuenta que al principio todo es amor, pero cuándo ya los problemas empiezan a mermar ese amor que juraron en el altar… la administracion de los bienes materiales se vuelve un VERDADERO PROBLEMA.
Según la ley guatemalteca, antes de “casarnos por lo civil” es requisito establecer sobre qué régimen económico vamos a basar nuestra unión. Así que antes de firmar el acta es indispensable entender cada uno de los regímenes que existen y las implicaciones que generan.
¿Bajo qué régimen económico nos conviene casarnos?
En el Código Civil guatemalteco se plasman los tres regímenes económicos.
1. Comunidad Absoluta de Bienes, “juntamos lo tuyo y lo míoy si nos divorciamos lo dividimos mita mita” Y ADIOS PUES….
2. Régimen de Separación Absoluta, “lo mío es mío y lo tuyo es tuyo, si nos divorciamos cada quien conserva lo suyo”.
3. Comunidad de Gananciales,“lo que tengas antes de casarte es tuyo y lo que hagamos durante el matrimonio es nuestro, si nos divorciamos lo dividimos mita mita” .
La relevancia del otorgamiento de las capitulaciones matrimoniales radica en que los futuros compañeros de vida tengan conocimiento de los derechos y de las obligaciones que asumen con el matrimonio,de la forma en la que los bienes pertenecen a cada uno y como podrán utilizarlos y distribuirlos al momento de disolverse.
¿Cuántos futuros esposos se preocupan por definir el régimen económico de su futuro matrimonio?
Un matrimonio va más allá de una buena parranda, es un compromiso personal entre dos personas, se trata de un contrato “tal vez uno de los más importantes de la vida”, que afecta la vida de los futuros esposos en muchos aspectos, inclusive el patrimonial. Así como nuestra misma legislación lo establece, el matrimonio es una “sociedad”, entonces, nos volvemos “socios” uno del otro.
Si bien los régimenes económicos van a regular como vamos a distribuir los bienes, no hablamos de como vamos a manejar las finanzas “durante el matrimonio”, tradicionalmente las mujeres nos habíamos acostumbrado a ceder el manejo del “dinero” al marido.
Que el hombre debe ser el que se ocupe de sostener a la mujer y los hijos y, aunque no sea ‘el proveedor’, igual administra el dinero y controla cuánto da a la mujer.
No estamos acostumbrados a hablar claro y llegar acuerdos, no se acuerda quien pagara la renta, si vamos a contribuir a los gastos en partes iguales, que le va a corresponder pagar a cada quien.
Un ejemplo interesante es la forma que se pacta en los matrimonios judíos, ellos celebran un contrato matrimonial llamado KETUBA. Este no es mas que un contrato que explica las obligaciones que tiene el esposo para con su esposa: por ejemplo proveerla de alimento y ropa, cuidarla, amarla y protegerla. En este contrato el hombre declara que cumplirá con sus obligaciones como marido, según la ley y la tradición judías. También se estipula la cantidad de dinero que el marido deberá entregar a su mujer en el caso de que se disuelva el matrimonio.
Es triste escuchar casos como el de esta joven madre viuda con dos pequeñas niñas, me comentaba que no habían transcurrido ni dos semanas del entierro de su esposo cuando tocaron a su puerta, dejándole una solicitud de desalojo. Cuál no sería su sorpresa que el “hogar” que según ella le pertenecía a ella y las niñas era propiedad de una sociedad anónima y su esposo era únicamente el representante legal, por lo que los socios le solicitaban abandonar el apartamento o el pago de una renta absurda, en menos de un mes estaba sola, sin ingresos, sin casa, sin nada. ¡Cómo pude ser tan irresponsable sollozaba al contarme su historia….Otra amiga me llamo por teléfono para preguntarme ¿QUE HACER? Tengo un problema, fijate que le di a mi marido una fuerte cantidad de dinero para que la invirtiera en un negocio que sería de los dos, sin embargo cada vez que le pido copia de la papelería legal, me dice que los papeles están en la caja fuerte o que los dejo en la oficina…. Tengo miedo…. Cada vez que pregunto siento que se molesta …pero era todo lo que me dejaron mis papas!!!
Tal vez por pereza, tal vez por romanticismo,no tenemos cultura de ir al notario a otorgar capitulaciones matrimoniales antes de casarnos, es decir, pactar en un documento qué reglas regirán las relaciones económicas del matrimonio. Abordar esta cuestión en el momento más dulce de la relación puede parecer inapropiado, calculador y poco delicado. Sin embargo, tener claro qué opciones hay y decidirse con conocimiento por una u otra, puede evitar muchas sorpresas durante el matrimonio y facilitar el doloroso trance de una separación o divorcio.