Mientras el presidente Alejandro Giammattei se dirige reiteradamente a la población para hablar de “planes de reactivación económica”, los médicos han manifestado públicamente su preocupación por la falta de Equipos de Protección Personal (EPP).
El equipo de colegiados, que enfrentan en primera línea el problema desde el hospital de Villa Nueva, ha gestionado sus propios insumos de protección, mientras que en el hospital San Juan de Dios los residentes organizan colectas para adquirir los mismos, esto bajo un contexto de alarde por parte del presidente Giammattei de su supuesta eficacia para enfrentar la crisis y su insistencia en priorizar planes económicos que a juicio de los médicos es un aspecto que ha pasado a segundo plano.
Durante los últimos días dos misivas han circulado en redes sociales, medios de comunicación y grupos de whatsapp, ambas suscritas por médicos guatemaltecos. Una de ellas fue elaborada por los “Médicos de Contingencia ante Pandemia Covid-19 HNEVN”, quienes en 10 puntos hicieron alusión a sus principales preocupaciones ante la emergencia suscitada por el coronavirus.
En el punto uno, los colegiados indicaron que los EPP que utilizan actualmente (trajes aislantes completos y lentes protectores) forman parte de una donación gestionada por el propio equipo médico. “Su número es escaso y la demanda, elevada, dado que no existen habitaciones adaptadas con presión negativa para disminuir la incidencia de contagios de personal de salud”.
Además, manifestaron que el equipo médico y de enfermería es insuficiente para hacerle frente a la situación. Otro de los puntos medulares de la carta es en donde manifiestan que muchas de las personas bajo estudio deben permanecer entre 48 y 72 horas mientras se confirma si están o no infectados, lo que supone un riesgo innecesario para los pacientes que den negativo.
El error de mezclar pacientes
Consultado un internista, que pidió omitir su nombre y que es suscriptor de la otra misiva abierta dirigida al presidente Giammattei, indicó que es un “grave error” mezclar a los pacientes. “Los que están en cuarentena y los que han dado positivo no deberían de estar en el mismo lugar, debería adecuarse otro espacio distinto, puesto esto solo supone un peligro de infección para los que solamente están bajo sospecha”, puntualizó.
En tanto, la otra carta suscrita por un centenar de colegiados hizo un llamado al presidente para que agilice la importación de EPP recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), “para ser distribuido a las necesidades, en puestos de salud, centros de salud y hospitales nacionales”.
Requirieron garantizar el suministro a hospitales de medicamentos que se utilizan como “parte del protocolo de tratamiento de casos graves de Covid-19”, así como la agilización de los resultados de las pruebas y gestionar donaciones de kits para incrementar el número de pruebas.
Los colegiados solicitaron “suspender toda actividad laboral por un lapso no menor de 4 semanas, con excepción de aquellas estrictamente necesarias para suplir las necesidades básicas de la población. “Esto incluye cerrar todo centro de trabajo multitudinario como maquilas y call centers”.
El presidente Giammattei flexibilizó las medidas de suspensión de actividades laborales y permitió las mismas bajo “algunas condiciones”, como la provisión de “mascarillas y gel”, lo que a criterio de los galenos es insuficiente. La experiencia de Wuhan es elocuente y solo el confinamiento drástico da buenos resultados ante la amenaza que supone el Covid-19.
“Son medidas a medias, no sirve de mucho el toque de queda, de 16 horas a 4 horas del día siguiente no hay movimiento, pero en horas permitidas aún hay un exceso de desplazamientos en todo el país”, dijo el médico, quien hizo un llamado a sus colegas a cerrar sus clínicas y atender solo casos de emergencia o terapias indispensables, como las dirigidas a pacientes con cáncer.
Los médicos piden restringir la circulación de personas arriba de los 60 años y pacientes con enfermedades crónicas, con el fin de proteger su salud.
“Aunque sabemos que varias de estas medidas ponen en riesgo la economía de nuestro país, nuestro compromiso es anteponer la salud y la vida de nuestros conciudadanos”, concluyen los médicos en la misiva suscrita por un centenar de profesionales de la salud.
El Gobierno de Guatemala ha publicado una convocatoria para contratar a médicos de diferentes especialidades, tales como internistas, intensivistas, cardiólogos y neumólogos, entre otros. No obstante, a juicio del especialista consultado, no habrá mucho interés por parte de los colegiados puesto que las autoridades no son capaces de garantizar su seguridad. “Yo no iría, porque el riesgo al que estaría expuesto es demasiado elevado”. Con tal criterio coincidió otra especialista, quien también pidió omitir su nombre. “Los médicos corremos más riesgo por la carga viral a la que estamos expuestos. Nosotros también tenemos familias y no podemos arriesgarnos sin que se nos garanticen los equipos.