¿Quiere cambiar? Recuerde la metáfora: un jinete, un elefante, un sistema. El jinete es racional, el elefante emocional, el sistema es el entorno. Veamos los últimos dos componentes.
Mueva al elefante. ¿Cómo hace para evitar la extinción de un pájaro único? Paul Butler, un estudiante de conservación en el Politécnico del noreste de Londres estudió el loro de St. Lucía, un pájaro con una cara turquesa, alas verdes y un escudo rojo en el pecho cuyo único hábitat natural es la isla de donde toma su nombre. El pájaro estaba al borde de la extinción, con únicamente 100 pájaros viviendo en el año 1977. ¿Qué hizo Butler? Encontró una emoción. Hizo una campaña en diversos medios, colegios, eventos deportivos, en donde creó como mascota al loro y su mensaje clave fue “cuidamos a los nuestros”. Creció el sentido de identidad de los habitantes de St. Lucía y les hizo vivir lo que significaba ser un ciudadano comprometido. ¿El resultado? La emoción relacionada al loro de St. Lucía motivó cambios incluso legales que hicieron que virtualmente fuera erradicada la caza del ave. Butler fue nombrado ciudadano de la isla y su método es ahora popularizado en el programa “Pride” (Orgullo).
¿Cómo mueve al elefante? Recuerde tres consejos: encuentre la emoción (saber algo no es suficiente para cambiar: haga que la gente sienta algo), encoja el cambio (haga el cambio lo suficientemente pequeño para que no se “asuste el elefante”; no planee en limpiar toda la casa, planee ordenar los platos) y crezca a su equipo (construya un sentido de identidad y fomente una mentalidad de cambio posible).
Cambie el sistema. ¿Cómo podría hacer que las personas coman menos comida chatarra? Brian Wansink, de Cornell University hizo un experimento en donde dos grupos de personas fueron invitados a ver una película y a permanecer unos minutos luego de terminada la misma para conocer su opinión acerca de la venta de comida. Les ofrecieron palomitas de maíz gratuitas. Cada grupo recibió un contenedor de diferente tamaño (no observaron lo que el otro grupo recibió). Las palomitas, sin embargo, tenían un defecto: estaban rancias (a propósito). ¿Quién comió más? Ninguno de ambos grupos terminó los alimentos por su sabor tan terrible, pero quienes recibieron el contenedor más grande comieron 53% más, 21 puñados más de alimentos y 173 más calorías. El experimento fue replicado en diversos lugares y cambiando la película. Los resultados fueron consistentes: entre más grande el plato, más comemos. Si quiere comer menos, seleccione platos más pequeños.
El paso final en un proceso de cambio es alterar el sistema. Como las situaciones cambian el comportamiento, cambie la situación.
Finalmente, construya su propia “manada”. El comportamiento es contagioso. Rodéese de personas que exhiban los comportamientos que desee.
En resumen, podemos hacer cambios sustantivos en cualquier área si recordamos apelar a lo racional (el jinete), hacer sentir a los demás (el elefante) y cambiar el sistema (o entorno). ¿Qué cambios desea hacer? El cambio es una constante, pero el crecimiento derivado del cambio es opcional.
¿Qué está haciendo hoy por alcanzar sus sueños?