Sin las compras y sin carro
Vania (nombre ficticio) es una joven que al igual que muchos guatemaltecos visita, eventualmente, los centros comerciales para hacer las compras necesarias. Un viernes, acudió a uno de ellos; parqueó su automóvil y se acercó al supermercado. Al terminar, salió con todas las bolsas en la mano y las guardó dentro de su vehículo.
A medio metro de distancia, un joven se le acercó para avisarle que uno de sus neumáticos estaba pinchado y le ofreció ayuda para cambiarlo. Inmediatamente, Vania aceptó. Se bajó del automóvil para darle las herramientas y colaborar.
Al momento de cambiar la llanta, el joven preguntó mucho, logrando que Vania se acercara a él, sin prestarle atención a lo que ocurría dentro de su auto. Durante el corto tiempo que Vania habló con quien le ayudaba, otros dos jóvenes sacaban todas las bolsas.
Después de eso, el joven arregló la llanta. Vania, le agradeció y cuando entró a su auto se percató de que ninguna de las bolsas estaba allí. Rápidamente notó que se trataba de un asalto y arrancó el carro para marcharse del lugar. Sin embargo, el trío de asaltantes impidió, de manera muy rápida, que se fuera, pues le quitaron el vehículo.
Desesperada gritó varias veces para que un guardia de seguridad pudiera auxiliarla; sin embargo, la respuesta fue que revisarían los videos que captaron las cámaras de seguridad para saber si encontraban algún dato que pudiera ayudarlos a encontrar al responsable. Vania sigue esperando.
Lo mismo de siempre
Vania es uno de los tantos casos en los que la indiferencia por parte de los encargados de seguridad de los lugares ha afectado a los que visitan sus instalaciones. Aunque su posible solución era denunciar lo ocurrido, la joven no confía en esos procesos y únicamente decidió no volver a ese centro comercial. Lamentablemente, no se trata de la inseguridad en un solo sitio, sino la que se encuentra en el país.
Contraparte
El centro comercial le explicó a Vania que su caso estaba en investigación por parte de la seguridad del lugar y que a partir de ese terrible inconveniente implementaron nuevos métodos de seguridad, para que los visitantes no sean atacados de la misma manera. Se disculparon con ella por lo ocurrido.
“No asistir a algún centro comercial podría ser es algo casi imposible. No debería ser una situación de la que se debe huir, al contrario, deberíamos ser personas libres de estar en cualquier lugar y estar seguros”, afirma Vania.
Lamentablemente, la realidad del país nos obliga a ser más cuidadosos con nuestros destinos. Por ello, te presentamos una lista de consejos que puedes tomar en cuenta para prevenir este tipo de asaltos.
- De preferencia sal acompañado.
- Si sales solo es mejor que estés atento a tu alrededor.
- Trata de que el proceso de llegar y subirte a tu automóvil sea rápido.
- No hables con desconocidos.
- Si tu neumático está en mal estado, quédate en el centro comercial, preferiblemente con algún agente de seguridad cerca y llama a tu seguro o persona de confianza.