A través de un video en redes sociales, se denunció que una gran cantidad de palomas que se encuentran en el área de la Catedral Metropolitana y Plaza de la Constitución había sido envenenadas.
La publicación mencionaba que muchas fueron encontradas muertas o agonizando, debido a la ingesta de algún alimento intoxicado.
Trabajadores municipales de la ciudad recogieron los cuerpos de 70 aves en la Catedral y unas 30 en los alrededores. Además, las ventas de alimentos y alpiste fueron retiradas de momento para analizar la comida de aves.
“Las palomas, tanto para niños y adultos, son parte de lo que es vivir el Parque Central. Son parte de la vida de la ciudad y ahora que vemos las procesiones, son parte de ello y debemos cuidarlas”, comentó el alcalde capitalino Ricardo Quiñónez.
Este no es el primer caso de posible envenenamiento. En noviembre de 1999 se encontraron 30 palomas muertas en el atrio de la Catedral. En 2007, al menos 50 aves también fueron encontradas sin vida en la plaza, por posible ingesta de maicillo infectado.
En agosto de 2018, varias palomas de la Catedral de Antigua Guatemala también fueron envenenadas con Tamaron, según la comuna del lugar.
Un análisis preliminar
“Se le pidió apoyo a la Facultad de Veterinaria de la Universidad de San Carlos para analizar tres cuerpos y los alimentos”, comentó Carlos Sandoval, portavoz de la Municipalidad de Guatemala.
Mientras tanto, tres cuerpos también fueron llevados al Centro de Atención de Mascotas municipal para los análisis correspondientes. Se encontró que las aves habían consumido esa misma mañana, algo que les causó intoxicación.
“No podemos decir que fue un envenenamiento, pero sí podemos resaltar que fue una intoxicación alimentaria”, agregó Quiñónez.
Tampoco se puede establecer que la reacción fue causada por el maicillo o alpiste. La comuna capitalina continúa a la espera de los resultados del análisis de la universidad para brindar una versión oficial.
Mientras tanto, el ayuntamiento aumentó la seguridad en el lugar con más trabajadores de la Policía Municipal, durante las horas de mayor concurrencia en Catedral y en la Plaza.
“Es importante que las personas tomen conciencia sobre que no pueden dejar alimentos en el lugar y que además deben reforzar la limpieza en el área”, manifestó el alcalde.
Quiñónez recalcó que las palomas son una parte importante de la ciudad y que cuidarlas es fundamental para mantener la Plaza como un atractivo para la población.
Expuso que estas medidas son parte de un proyecto municipal para mejorar el parque central, apuntando a celebrar las fechas del bicentenario de la Independencia el próximo año.
Aunque no se ha encontrado al responsable, se sospecha que no se trató de un acto intencionado.
Incluso, una página satírica en Facebook responsabilizó del acto al youtuber mexicano Luis Arturo Villar (Luisito Comunica). Aunque Villar no tuvo nada que ver, está acostumbrado a este tipo de bromas.
Usuarios en redes hicieron un llamado a evitar la desinformación, mientras que otros insultaban a Villar, quien aparecía en una fotografía junto a unas palomas en un lugar que claramente no era Guatemala.
¿Son un peligro?
En redes sociales, usuarios celebraron la muerte de las palomas argumentando que existe una sobrepoblación de estas aves. Otros, calificaron el hecho como un atentado contra la naturaleza.
“Las palomas viven en lugares como estos porque nacen ahí e imitan la conducta de sus padres”, dio a conocer el veterinario Julio Fajardo.
Agregó que no se han encontrado enfermedades transmitidas directamente por palomas sedentarias. Afecciones como la encefalitis del Nilo sí pueden ser transportadas de un lugar a otro, pero únicamente por aves migratorias.
“Es más el daño que le pueden ocasionar a los monumentos que el que le pueden causar al humano, ya que casi no tienen contacto con él”, refirió.
Las heces pueden causar daños en estructuras, debido a que son bastante ácidas al descomponerse. Estas pueden causar daños en paredes cuando cae la lluvia.
La mayoría de enfermedades, bacterias o problemas, es causada por temas de limpieza y parásitos en las heces, en el caso de palomas domésticas que no reciben cuidados adecuados por parte de sus dueños.
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La Ley de Bienestar y Protección Animal, en su artículo 62, considera esta práctica como infracción gravísima. Se sanciona con una multa de 12 salarios mínimos mensuales si el caso es denunciado y se da con el responsable.
Envenenar o intoxicar a un animal, usando para ello cualquier sustancia venenosa o tóxica, sea de carácter líquido, sólido, gaseoso o volátil, mineral u orgánico, sin que medie razón técnica o científica, así como abandonar sustancias venenosas perjudiciales en lugares accesibles para los animales, las personas y el ambiente”.
Fotos: Facebook, Municipalidad de Guatemala.