“Sus derechos humanos, evidentemente fueron vulnerados”.- Licda. Lilian Guzmán, de la PGN
Anoche circulaba por las redes sociales principales un desgarrador video que se viralizaba por la violencia que contenía. En él se podía observar a una niña que estaba siendo rescatada tras haber caído en las profundidades de un pozo. Familiares y vecinos socorrían a la menor, con desesperación y usando lazos lograron sacarla de lo que bien podría haber sido su tumba.
En Guatemala, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), se colocan diariamente 35 denuncias de maltrato infantil y este es solo uno de esos casos.
El video viral
Tres hombres luchan por rescatarla mientras las mujeres dicen “cuidado con su cabeza”, “ya estuvo”, “pobre la niña”, en un esfuerzo conjunto sacan a la niña del fondo; la pequeña lucía claramente en estado de shock. Algunos comienzan a celebrar la alegría, hay niños, adultos, mujeres y hombres alrededor. “Dale agua de sal”, se escucha, e inmediatamente mientras le quitan los lazos que tenía amarrados al cuerpo, las mujeres comienzan a decir “no le vayan a pegar”, algo sabían para hacer esa recomendación. “Déjala que se tranquilice porque después les pegan cuando le pasa”, “dale cariño”, repetían las mujeres hasta que se escucha irrumpir la voz de un hombre que grita: “Con cariño no se compone”, jala a la niña del brazo, la aleja de la muchedumbre y le acierta 4 golpes en el cuerpo con un cinturón, mientras le grita; lo hace con fuerza, sin piedad, como con algún derecho. “¡No Walter!, grita la niña”, pero ya es tarde.
“Que se componga”, grita el hombre, mientras los vecinos le increpan: “¿Y si se muere?”, a lo que él contesta “Pues, si se muere es peor, que aprenda”, “que se muera”, grita antes de irse. Las mujeres intentan entrar en razón al golpeador mientras el resto de niños llegan a abrazar a la pequeña que ha sobrevivido al caer dentro de un pozo y a una golpiza.
Reacción estatal
El escenario es San Juan Sacatepéquez y el llanto y los gritos de la niña son tan desgarradores que se viralizaron y activaron a todo el aparato del Estado. Policía Nacional Civil, Ministerio Público, la Procuraduría General de la Nación, el Comité Comunitario de Desarrollo, la Policía Municipal y Derechos Humanos, comenzaron en paralelo sus procesos, desde sus propias áreas. Es deber del Estado proteger la salud física, mental y moral de la niñez y la adolescencia.
Aunque aún en muchas comunidades sea “común” pegarles a los niños para “educarlos”, es preciso recordar que hacerlo ES UN DELITO.
En un video comunicado, la Procuraduría General de la Nación aceptó la veracidad del caso y que la niña había sido maltratada por parte de un familiar. Indicaron: “A través de la Procuraduría de la Niñez y la Adolescencia, desde el momento en que se tuvo conocimiento de estos hechos, se realizaron las coordinaciones necesarias para realizar la constatación de la niña. (…) Hoy mismo se realizó el rescate de la menor y se la movilizó hacia el edificio de El Modelo de Atención Integral de Niñez y Adolescencia (MAINA).
El MAINA es el sistema que permite la restitución de los daños causados a menores que han sido vulnerados en sus derechos humanos. Y sí, pegarle a un menor es vulnerar sus derechos.
Para bien de la niña, se inició el protocolo que indica ese sistema y comenzó también el proceso de medidas de su protección. Lilian Guzmán, de PGN, aclaró que iniciaron ya las diligencias de la investigación criminal para poder determinar las responsabilidades en las que puedan incurrir las personas que fueren constitutivas de los delitos cometidos contra la menor.
Es decir, hoy la menor no dormirá en su casa y fue alejada de su familia porque solo así estará lejos de su golpeador. Junto con ella, se rescató a otras 3 menores que sufrían los mismos ataques. El agresor será investigado sí, pero la niña y sus 3 primas podrían ir a hogares temporales que no son precisamente el mejor lugar para crecer.
Por su parte, la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) informó que la Auxiliatura Municipal de San Juan abrirá también un expediente ante la denuncia de maltrato y que dará seguimiento al caso.
El agresor
El aparato del Estado informaba desde horas de la tarde que hacía ya diligencias e investigaciones para deslindar responsabilidades. El hombre del video, según denuncias públicas sería el tío de la niña, Walter Baten Cuyuch, alias “Ale Baten”, quien es reconocido en su comunidad por sus deseos desbocados de querer ser un youtuber. Por la tarde de este 21 de agosto fue aprehendido en la zona 2 capitalina por orden girada en el Juzgado de Primera Instancia Penal.
El joven “youtuber” se dedica a hacer videos donde ha señalado públicamente a muchos vecinos e incluso ha ridiculizado a algunos, por tanto, no dudaron en denunciar sus actos de forma pública.El comentario entre internautas, tras la noticia, es que la presión social tuvo un fuerte efecto en el sistema de justicia.
Habrá de esperarse el avance en la investigación por parte de las instituciones que velan porque ni esta, ni cualquier otra niña vuelva a recibir un golpe más. Seguramente este caso viral servirá para educar sobre el tema a la sociedad.
Leyes de protección
Nuestro país suscribió el 26 de enero de 1990 a la Convención sobre los Derechos del Niño, que claramente indican que la violencia no está permitida; se creó desde entonces la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia (PINA) que defiende a los niños de tales actos brutales. Y ante el cumplimiento de los Derechos Humanos y de los niños, nadie puede golpear a un menor. Tal acto daña la integridad y va en detrimento de todas las leyes que velan que los niños no sean maltratados.
De hecho, la Ley PINA deja como obligación de la sociedad velar que estas acciones no ocurran. Aquí puedes encontrar la parte legal, activa en nuestro país que deja claro que no está permitido golpear a un menor.
Otros esfuerzos
Ya que el maltrato contra menores de edad es uno de los 10 delitos más denunciados en el país, según el MP, desde el 2016 el Congreso busca reformar el Código Penal para que los padres de familia tengan prohibida “toda forma de violencia física (…) con el propósito de corregir una conducta no deseable” en sus hijos. La nueva ley contemplaría, incluso, prisión de entre cuatro y ocho años por “cualquier acción” que “provoque daño físico como forma de corrección o disciplina”. Esta ley sigue en revisión con detractores e impulsores.
Efectos a largo plazo
La psicología es clara, los niños que son testigos de la violencia doméstica o que son víctimas de abuso físico tienen un riesgo grave de tener problemas de salud mental y física a largo plazo. Al crecer repiten ese comportamiento y se convierten en adultos abusadores y violentos. Golpear no es una forma de educar.