Ambos estuvieron en la misma diligencia de reconocimiento judicial del edificio que se compró para el Ministerio Público, durante la gestión de Thelma Esperanza Aldana. Luego del pago de más de Q35 millones se ordenó la captura de la exfiscal general, pues se le señala de no velar por el buen gasto de los fondos del Estado. Y aunque los dos estuvieron en la misma diligencia judicial, cada uno vio la edificación de forma distinta.
En septiembre de 2019, el juzgado Undécimo Penal, firmó la solicitud de orden de captura en contra de Aldana, a solicitud del Ministerio Público. Según el MP, Aldana habría cometido los delitos de abuso de autoridad y fraude por la millonaria compra que aún estaba en obra gris. “El edificio no estaba terminado, no tenía acabados, ni agua propia. Además, tenía una hipoteca de Q10 millones y la zona donde se ubica no es segura para este tipo de instalaciones”, aseguró el fiscal Marlon Pacheco. Junto a la solicitud de captura contra Aldana se emitieron otras seis órdenes a funcionarios del MP y empresarios involucrados en la negociación.
Una visita, dos puntos de vista
“Estuvimos en la misma diligencia y no vimos las mismas cosas”.
Francisco Solórzano Foppa
Para el exjefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Francisco Solórzano Foppa, la inspección del inmueble demostró que las instalaciones están listas para ser ocupadas por el MP. “Es un edificio habitable, que tiene condiciones adecuadas para el personal, obviamente por años de estar vacío hay que limpiarlo y acondicionarlo”, aseguró. Y para validar su postura publicó una serie de fotografías del interior del inmueble. Además, concluyó que la visita prueba dos cosas: “Que no hubo sobrevaloración y que se inventaron el caso”.
“Él no se metió a ver la realidad del edificio, solo mostró las partes bonitas, pero la verdad es que es un edificio inhabitable”.
Raúl Falla Ovalle.
Por su lado, el abogado Raúl Falla, quien también estuvo en la inspección, mostró un lado menos pulcro del inmueble. En las imágenes de Falla se pueden ver inodoros rotos, sucios, instalaciones eléctricas inconclusas, vidrios rotos y hasta regaderas con tierra. En sus redes sociales, Falla recalcó que el pago de Q35 millones por el inmueble es un fraude, pues sus instalaciones se encuentran en un estado “penoso”.
Sobre la diferencia de percepciones del estado del inmueble, pues uno lo ve como un espacio listo para ser ocupado y el otro como una estructura deplorable, ambos defienden sus posturas. Para Falla, las condiciones en que se encuentra el edificio son la prueba de que se pagó de más por un bien que no está listo para ser utilizado. Mientras que Solórzano Foppa asegura que no se usa pues a la fiscal Consuelo Porras simplemente no se le da la gana.
“Él enseña el baño de un edificio al que no se le ha dado mantenimiento en dos años”, Francisco Solórzano Foppa.
“Muestra temas de cielo falso, pero en las fotos se puede ver que se quita para instalar la red del edificio”, Francisco Solórzano Foppa.
“Es un edificio habitable, que tiene condiciones adecuadas para el personal, pero por el descuido de dos años habrá que limpiarlo y acondicionarlo”, Francisco Solórzano Foppa.
“En sus fotos se presenta la parte bonita del edificio, pero él no fue a ver los lugares dañados”, Raúl Falla Ovalle.
“Él trabajó para el MP y muy posiblemente hay cosas en las que él tenga que ver”, Raúl Falla Ovalle.
“Pareciera que él se está burlando de los juzgados, al poner tres o cuatro fotos de lo que le conviene, pero de la falta de agua no dijo nada”, Raúl Falla Ovalle.
