Los delegados del Instituto Nacional de Migración (INM) han trabajado para registrar lo más rápido posible a los migrantes hondureños; algunos han sido deportados a su país de origen por autoridades nacionales, otros han avanzado hacia tierras mexicanas y algunos siguen su tránsito en nuestro país.
Su ingreso
Desde el pasado lunes llegaron los primeros migrantes hondureños a la frontera de Agua Caliente. Aproximadamente 700 personas ingresaron a tierras guatemaltecas; algunos, incluso, cruzaron la frontera hasta el día de ayer.
El Gobierno guatemalteco aseguró, por medio del INM, que los centroamericanos pueden entrar libremente al territorio, pero hay un elemento que deben tomar en cuenta: cumplir ciertos requisitos.
¿Cómo ha sido el proceso?
Varios hondureños han buscado refugio en la Casa del Migrante. Este es el primer lugar en la mente de los centroamericanos, debido a que tienen asegurado un tiempo de comida, baño, ducha e incluso servicio de wifi para comunicarse con sus familiares que se quedaron en su país de origen.
“En dos días hemos tenido a más de 700 personas que van llegando en grupos regularmente grandes”, expresa Susana Morales, encargada de Comunicación en la Casa del Migrante.
CRISIS
Sin embargo, por la alta cantidad de personas ubicadas en la Casa del Migrante, no se cuenta con un espacio que pueda permitir la estancia de todos. Debido a este factor, los hondureños están en las calles de la ciudad esperando su registro, mientras que otros comienzan a desesperarse y buscar otra alternativa que pueda acercarlos a la más pronta estabilidad.
¿Existirá una probabilidad de que se queden en Guatemala?
En una conferencia, Juan Orlando Hernández, presidente de Honduras, comentó que aproximadamente 500 migrantes se están regresando a ese país centroamericano desde la frontera de México, lugar en el cual las autoridades les impidieron el paso este fin de semana.
El presidente de Guatemala, Jimmy Morales, agregó que junto con el Ministerio del Interior han coordinado el “retorno seguro” de los centroamericanos.
¿Cómo será el “retorno seguro”?
Se calcula que el “retorno seguro” de los migrantes hondureños sea por el puerto fronterizo de El Corintio, en coordinación y colaboración con las autoridades migratorias hondureñas, para un mayor precaución con los migrantes.
Esperanza
A pesar de que varios centroamericanos han regresado a su país de origen, otros no se dieron por vencidos. Este es el caso de los hondureños que recorrieron las calles de la Ciudad de Guatemala este jueves 17 de enero, al salir de varios albergues en los que se refugiaron. Se dirigieron por el sector del Periférico, en zonas 3 y 7, en busca de la ruta que los guiara a su destino.
Actitud de los guatemaltecos
La caravana continúa pasando por Guatemala y la esperanza es la fuerza que motiva a los hondureños a seguir buscando su objetivo. Algunos migrantes corren con la suerte de que automovilistas les den “jalón”, otros han recibido gestos de solidaridad por parte de algunos guatemaltecos que les han brindado agua y pan. Sin embargo, la cantidad de personas que han estado dispuestas a ayudarlos este año es menor que las que decidieron auxiliar a los integrantes de la caravana del año anterior.
¿Se pensarán quedar en Guatemala?
Varios migrantes hondureños no catalogan Guatemala como una opción para quedarse, debido a que consideran que este país no tiene la estabilidad que ellos buscan. Su mejor destino es Estados Unidos, y en el peor de los casos sería México el país en el que aspiran quedarse.
Según información de la Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos, más de 3 millones de guatemaltecos están desempleados. De ese total, el 46 por ciento son hombres y el 54 por ciento, mujeres. De estos datos se puede concluir que encontrar un empleo en el país es algo complejo, que además exige tener preparación. Suponiendo que algunos migrantes hondureños se queden en el país buscando una mejor calidad de vida, el porcentaje de desempleo podría aumentar, tomando en cuenta que muchas de las personas que vienen en dicha caravana no han tenido oportunidad de una buena educación. Esto podría ocasionar otra probable crisis para estas personas que claramente no vienen buscando caer a lo mismo que Honduras les ofrecía.
La solución se buscará en otras naciones hasta que las autoridades de los países de origen no plateen nuevos sistemas que permitan mayor educación, empleo, oportunidad, menos escasez o una mejor calidad de vida. No solo los hondureños han buscado refugio en otros lados, hay muchas historias como estas y en las que también han arriesgado mucho para tener un mínimo de estabilidad.