Le pidieron desinfectarse los pies para entrar a la casa y le dieron de comer en platos desechables
A una de ellas le obligaron a echarse alcohol en los pies antes de entrar a su casa para desinfectárselos.
Que comiera en platos desechables por los gérmenes.
La trataron de burra e incompetente.
Incluso les pasan el polígrafo para saber si son mentirosas o ladronas.
Así sufren de discriminación y maltrato las empleadas domésticas.
Las contratantes de estas mujeres incluso llegan a colocar cámaras en toda la casa para mantener estricto control sobre ellas.
Las empleadas domésticas se quejan del salario que les pagan, muchas veces no suma los Q1,500 mensuales y solo tienen un día de descanso.
Agregado a eso quieren que les cuiden a los niños, los perros, que laven ropa, cocinen y se duerman a las 9 de la noche.
Incluso, algunas se han quejado de golpes en la cabeza.
A pesar de ser ilegal, publican sus fotos en las redes acusándolas de ser ladronas, haraganas, sucias y abusivas.
De esa manera, desprestigian a las mujeres que llegan a trabajar a sus casas y que cansadas del maltrato que reciben, prefieren irse, aunque se queden desempleadas.
También, las condenan, debido a que ya no logran colocarse en ninguna casa para ser contratadas.
Las empleadoras, sin embargo, se quejan de ellas.
Advierten a las demás con fotos de DPI que no las contraten porque tiran la ropa para evitar lavarla, se comen todo, roban joyas y jeans. Todo lo que puedan llevarse a sus casas.
Asimismo, indican que registran todo. O solo quieren estar viendo televisión y en el celular.
¿Quién tendrá la razón?
Lo cierto es ni una puede vivir sin la otra, porque al final las empleadoras necesitan quién las apoye en las tareas domésticas y las trabajadoras requieren de un empleo para sobrevivir.
Sin embargo, ya se reportaron denuncias de ambas partes en el Ministerio Público, Ministerio de Trabajo y Procuraduría de los Derechos Humanos.
Fuente: Reporte empleadas domésticas, Procuraduría de los Derechos Humanos
Fotos: Google