Natalia es una chica de 24 años que demuestra que su pasión, puede llegar a cualquier rincón del mundo.
Cuando salió del colegio, no tenía ni idea de lo que quería estudiar, entonces decidió el aplicar a una beca de artes visuales. Durante ese tiempo quería aprovechar para hacer algo, le gustaba muchísimo todo lo que tenía que ver con pintar, las artes, etc. Así que se metió a un voluntariado en una ONG como maestra de artes. Fue en esos momentos que descubrió lo que amaba, su pasión con las artes, pero, se dio cuenta que no era suficiente ya que quería ayudar a las personas de una manera más directa y mejor, entonces descubrió que existía el arte terapia.
Esta rama de terapias, es la aplicación del arte para mejorar el estado mental, físico y emocional del individuo. Al ver que esta rama era una solución a lo que buscaba, decidió estudiar psicología, de la cual, ya se graduó. Estudió Psicología Clínica y actualmente tiene la oportunidad de ejercer como tal. Pero aquí no se queda la cosa, a Natalia le encantaría especializarse en Arte terapia o Neurociencia.
El Grafiti se volvió una increíble forma para expresarse
Durante este voluntariado con la ONG, también se metió a un diplomado de Grafiti, donde aprendió el arte de esta técnica y también su cultura, la importancia del mismo.
“Siempre me llamo la atención este arte, cambio mi perspectiva por completo al primer “esprayaso”, no es fácil, fue un reto con las técnicas, es un arte que ha ido creciendo y he conocido a mucha gente que es muy pilas en esto” comenta.
Natalia ha estado en proyectos grandes e importantes donde ha podido dejar su huella con el spray. Una de ellas fue en el diplomado que recibió, ya que, como proyecto final, pudo hacer una pieza de grafiti con muchos compañeros talentosos. Otro, fue con la ONG, ya que se dio cuenta de cómo el arte puede ayudar a las personas con su expresión, con ellos hizo talleres, murales, piezas y más. También ha buscado lugares donde hacer murales, entre ellos está su casa donde su cuarto y el de su hermano han sido resultados increíbles de su arte.
En Guatemala y en muchos países, el arte del grafiti es mal visto, ya que los muchos lo asocian a las maras, pandillas, etc. Natalia nos comparte su opinión acerca de este tema.
“Me he topado con gente que tiene muchos prejuicios sobre el grafiti, y automáticamente lo asocian a “delincuencia” y un montón connotaciones negativas. Pero creo que primero les diría que echen un vistazo a los murales que hay alrededor del país, del mundo y que después hablamos (se ríe). Les diría que el fin del arte es representar y transmitir: emociones, sentimientos, sensaciones… Y a lo largo de la historia el grafiti ha sido y sigue siendo un canal para expresar libertad, temas importantes, profundos, controversiales, pero a la vez belleza y originalidad.”