El COVID-19 puso en peligro la industria de la aeronáutica, el comercio de las líneas aéreas y el turismo, al provocar el cierre de las fronteras de diversos países y la cancelación de miles de vuelos. Cinco meses después del inicio del confinamiento, Guatemala continúa cerrado para el mundo mientras la región centroamericana ya logró crear protocolos de reapertura y reiniciar los vuelos internacionales.
El Gobierno de Honduras anunció este lunes que a partir de la siguiente semana se reabrirán los aeropuertos y reanudarán los vuelos. Las pistas de aterrizaje de San Pedro Sula, Tegucigalpa, Roatán y La Ceiba vuelven a funcionar y sus terminales trabajarán bajo medidas de bioseguridad.
Hasta cinco aerolíneas anunciaron su regreso a las operaciones junto a la reapertura de Honduras. Entre el 19 y 21 de agosto, diversos vuelos por parte de American Airlines, United y Spirit ya podrán ser abordados por viajeros con rutas desde y hacia ciudades estadounidenses como Miami, Houston y Fort Lauderdale.
Con esta decisión, Honduras se une a Belice, Costa Rica y Panamá como los países que han logrado reactivar la industria del transporte en la región. Guatemala y El Salvador se quedan rezagados sin tener una forma de iniciar operaciones aún de forma esclarecida.
Recientemente, la NOTAM cambió la fecha de reanudación de los vuelos en el espacio aéreo guatemalteco para el 1 de septiembre como fecha tentativa. NOTAM significa “aviso a navegantes” (Notice To Airman por sus siglas en inglés) y es la explicación por la cual las diferentes aerolíneas que operan en el país han podido ofrecer vuelos a pesar de existir una autorización oficial por parte del Gobierno de Guatemala para poder abrir las fronteras. Se trata de una notificación sobre la navegación que es emitida por las autoridades de la aviación en cada país y que coloca las restricciones que existen para sobrevolar, aterrizar o despegar en un lugar. Es la tercera vez que la notificación es actualizada desde el inicio de la cuarentena.
Pero, mientras el aeropuerto se mantiene cerrado, todo el sector turístico debe esperar cada vez más por reabrir. Según Diego Díaz, presidente de la Cámara de Turismo, “el turismo se vio afectado desde que iniciaron los casos en Europa y no solo en nuestra región, porque los grupos de viajeros cancelaron sus viajes. Realmente, al turismo es el primer sector que fue afectado y el último que podrá reabrir”.
A pesar de que Díaz ve próxima la reapertura del aeropuerto según la NOTAM, también reflexionó sobre el tiempo que tomará poder realizar turismo nuevamente. “Ya sabemos que la NOTAM es en septiembre y puede que se retrase unos días, pero el turismo va a seguir sintiendo los efectos de la pandemia. Las personas seguirán sin venir hasta fin de año, porque todavía debe realizarse un reacomodo dentro de toda la industria. Por ejemplo, las aerolíneas deben volver a reacomodar sus rutas y en el momento que se abran las fronteras, no se vendrá una avalancha de vuelos, ya que las compañías aéreas también deberán probar sus protocolos para asegurar que es viable viajar hacia nuestro país. Por otro lado, tomará también cierto tiempo en que las personas se animen a viajar nuevamente”.
En cuanto a la espera que Guatemala deba seguir teniendo, mientras que otros países ya reciben viajeros, Díaz comentó que “cada día cuenta dentro de la competitividad. Debido a que toma tiempo toda la reapertura, cada día de espera representa también más tiempo en esta crisis. Estamos compitiendo contra vecinos muy duros como México, Costa Rica o Belice. Guatemala necesita campañas agresivas para incentivar el turismo en el extranjero. Por otro lado, el extranjero va a buscar lo que a Guatemala le sobra: áreas verdes. Es necesario una fuerte campaña para incentivar que visiten Guatemala, porque cada día cuenta”.
Por último, Díaz reflexionó que también es necesario que el gobierno tiene que designar un presupuesto especial para que el turismo pueda subsistir. “Creemos en el turismo responsable y cuidar la vida de las personas. Tenemos nuestros protocolos de seguridad, pero en realidad, no solo con esto puede subsistir, porque el negocio está quebrado y las personas están buscando nuevas profesiones”.
