Un domingo, la familia de Cristina Contreras se preparaba para disfrutar de un día tranquilo en la casa, pero aproximadamente a las 10:00 de la mañana, Mati, su mamá, sintió un fuerte dolor en el pecho, que causó que todos se alertaran.
Cristina reviso a su mamá, le dio una pastilla para el dolor, creyendo que pronto pasaría, pero este incrementó, lo que la angustió y decidió llevarla al hospital. Preparó a Mati para salir, pero al abrir el portón de su casa, no pudo sacar su vehículo, pues otro lo tapaba.
Cristina llamó a sus vecinos cercanos para preguntar de quién era el carro, pero nadie contestó.
“Estaba angustiada, no sabía qué más hacer y tenía que llevar a mi mami al hospital, porque se sentía mal”. Cristina Contreras.
Contreras llamó a los bomberos y se llevaron rápido a Mati al hospital. La familia estaba muy preocupada y al mismo tiempo enojada, por el automóvil que les impidió salir.
En el hospital, le dijeron a Cristina que su madre había sufrido un infarto, pero que estaban a tiempo, aunque hubiese sido mejor que llegaran antes, eso la entristeció porque no fue negligencia, sino por el carro atravesado.
Los hijos de Cristina se quedaron en la casa, llamaron a las autoridades para poder retirar el vehículo. Pasaron alrededor de dos horas y ya no estaba, no supieron a quién pertenecía.
Cristina alertó a sus vecinos para que no dejen carros tapando los portones, para que no se repita lo que le pasó.