¡A Dwight “El Tanque” Pezzarossi le sonríe el destino!
Hace año y medio estaba encerrado en lo que ahora es la cárcel del cuartel militar Mariscal Zavala, acusado de haber recibido comisiones ilícitas en el Ministerio de Cultura y Deportes.
Ahora, la gramilla de las canchas donde se entrenan los seleccionados nacionales es su lugar de trabajo.
A pesar de tener antecedentes penales, tras haber sido señalado por cometer actos anómalos; tener un expediente abierto en el Ministerio Público, donde se le acusa de haber recibido comisiones por favorecer a varias empresas con contratos de seguridad, fue llamado a ocupar un puesto de servidor público.
Pezzarossi está bajo libertad condicional, pero ello no fue impedimento para que se le admita como asistente del técnico Amarini Villatoro, con el objetivo de entrenar a la Selección Nacional de Guatemala, que próximamente se enfrentará a la de Costa Rica, a pesar de que hay técnicos que se prepararon para ese puesto durante tres años consecutivos.
De acuerdo con la Fedefut, para poder dirigir el entrenamiento en ligas intermedias y ligas mayores se debe tener un título de acreditación de estudios de tres años.
Por lo anterior, se consultó a la Fedefut sobre si Pezzarossi contaba con ese mérito, pero solo indicaron que esos datos no podían ser dados a conocer.
Durante un año, “El Tanque” fue comisionado del Deporte durante el gobierno de Otto Pérez Molina. Un año más tarde fue nombrado ministro de Cultura y Deportes, cargo al que renunció un año después. Tras dimitir, expuso que la cultura no era su fuerte.
Pezzarossi fue capturado el 3 de junio de 2016, y pasó entre rejas año y medio hasta que el juez decidió otorgarle arresto domiciliar.
“El Tanque” jugó en canchas de España, Inglaterra y Chile; sin embargo, su mayor desacierto fue haberse involucrado en la política.
Fuente: MP
Fotos: Selección Nacional de Guatemala.