Bajo el pasamontañas abusos, control y miedo.
No son muy agradables para los habitantes y hablan de ellos en voz baja porque les tienen miedo.
Hace diez años, los veían con buenos ojos, pero hoy los abusos cometidos contra la población, especialmente la joven, los tiene cansados.
Se pasan de los límites. A la población le tienen prohibido salir después de las 9 de la noche y cuando ven a alguien después de esa hora, mujer, hombre o niño lo golpean y llevan al calabozo.
Ellos permanecen hasta las tres de la mañana en la calle, se turnan la vigilancia, y los habitantes de San Juan y San Pedro Sacatepéquez ya lo ven como un toque de queda.
Los ronderos les dicen y tienen perros entrenados para atacar, Sin embargo, cuando ven un perro en la calle, que no es de ellos, le dan veneno.
Los ronderos, siempre tienen el rostro cubierto, armas de fuego o machetes, y no dejan que nadie ajeno a la comunidad ingrese sin ser identificado.
Tienen radios y se comunican con ronderos de otras comunidades cuando ven algo o a alguien sospechoso para ellos.
Están en muchos lugares del país, pero los más señalados son los amos y señores de San Pedro y San Juan Sacatepéquez.
Son agresivos, dicen algunos vecinos y han llegado a señalar que tienen un escuadrón de la muerte que se encarga de torturar y matar a quien consideran un extorsionista o delincuente. Aunque algunas veces no investigan si es verdad o mentira.
Los excesos son muchos.
Tanto que se ha formado un grupo en la red social denominado Asociación Anti ronderos y cuestionan que mantengan el rostro oculto con pasamontañas negro, el uso de armas de fuego e impidan la libertad de locomoción.
Vecinos han denunciado ante la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) que son extorsionados por los integrantes de las patrullas, quienes exigen el pago de Q30 diarios a cambio de no ser tomados en cuenta en las rondas de vigilancia que suelen ser obligatorias.
La denuncia también menciona la supuesta existencia de un cementerio clandestino en el lugar donde serían sepultados los cuerpos de presuntos pandilleros que han sido linchados, sindicados de cometer ilícitos.
Los patrullajes están asustando a los vecinos y se han convertido en un problema.
En esa tierra nadie pone un pie sin el consentimiento de ellos y quien se atreva a cruzar sus límites podría recibir un balazo.
Los ronderos mandan y las autoridades no hacen nada para evitar que sigan abusando de la población.
Fuente: PNC, Tesis La ilegalidad de las Patrullas de Seguridad Ciudadana del Municipio de San Juan Sacatepéquez, USAC, Heidi Rojas. Página Asociación Anti Ronderos de San Juan Sacatepéquez.
Fotos: Canal Estrella TV, Pkg, Asociación Anti ronderos San Juan Sacatepéquez, plus Google.com