Las mujeres tienen en la actualidad una baja participación en el mundo científico, tecnológico, de ingeniería y de matemáticas. Para lograr más integramiento en estos campos, el programa de inclusión DigiGirlz, promovido por Microsoft, busca exponer, capacitar y alentar a las jóvenes para que continúen rompiendo paradigmas y triunfando en estos sectores.
Según datos de Microsoft (2018), las mujeres ocupan solamente un 20 por ciento en puestos de tecnología dentro de una empresa, por lo que DigiGirlz Guatemala realiza conferencias con niñas que aún se encuentran estudiando, con el propósito de dar a conocer personajes destacables en diferentes industrias y puedan convertirse en una inspiración para muchas otras.
Thania Segura, gerente general de Microsoft para Centroamérica y Venezuela, cuenta que de los grandes retos que tiene el mundo en general, es la inclusión o la posibilidad de tener más mujeres dentro de las carreras del área de tecnología.
Casos de éxito
Grandes mujeres destacadas participaron como conferencistas, relatando su experiencia de hacia dónde las ha llevado la tecnología. Por ejemplo, África Flores es una científica guatemalteca que trabaja en un proyecto que consiste en predecir los florecimientos algales nocivos por medio de Inteligencia Artificial, en el Lago de Atitlán.
También participó la ingeniera química Fernanda Velásquez, quien tiene un MBA y una maestría en Ciencia de Polímeros. Actualmente es la gerente de planta de productos de cuidado del hogar de Colgate Palmolive.
La idea es motivar a estas niñas para que sigan carreras de ciencia, tecnología y matemáticas, a través de la exposición de otras mujeres con experiencia y que han llegado a lo alto de su carrera con la tecnología”, resalta Segura.
En Guatemala, de cada 100 estudiantes 30 son mujeres; de este grupo, el 40 por ciento estudia tecnología, pero solamente el 20 por ciento termina la carrera. Aún existen grandes diferencias entre hombres y mujeres, por lo que es preciso que esta brecha se estreche. Los retos son salir de los paradigmas y, de alguna manera, enseñarles a otras mujeres que sí se puede estudiar tecnología.
Fuente: Microsoft