Los alimentos en su totalidad y los nutrientes que los componen tienen un papel importante en el desarrollo, mantenimiento y fortalecimiento del sistema inmune. Tienes que recordar que, por medio de una serie de procesos, el cuerpo tiene la capacidad de combatir y destruir organismos infecciosos invasores antes de que causen daño, siempre y cuando el sistema inmunológico se encuentre preparado.
Según el médico Francisco Herrera Morales, ejecutivo de Medical Marketing, en estos momentos es muy importante mantener un estado nutricional óptimo para que el sistema de defensa funcione adecuadamente, ya que muchas de sus funciones se llevan a cabo gracias a la acción de vitaminas y minerales que participan como cofactores (mediadores) para que los procesos se lleven a cabo.
Nutrientes y sistema inmune
Varias vitaminas y minerales poseen un papel esencial en el mantenimiento de la función inmunitaria. Por eso, una dieta variada y equilibrada es la clave.
De acuerdo con la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, en inglés), las vitaminas C, A, D, B6, B12, el ácido fólico, y minerales como el hierro, el zinc y el selenio, entre otros, participan en el correcto funcionamiento del sistema inmunitario.
Cada vitamina que entre a tu cuerpo ayuda al sistema inmunológico de manera distinta, por lo que es importante conocer sus funciones y los alimentos que son fuente de estos nutrientes para preparar nuestro cuerpo ante riesgos de enfermedades:
Vitamina C
Necesaria para formar colágeno, contribuye muy bien al mantenimiento de las barreras naturales contra las infecciones. Los alimentos que más la contienen son las naranjas, kiwi, mango, piña, melón, fresas y tomates.
Vitamina A
Juega un papel muy importante en las infecciones y en el mantenimiento de las superficies de las mucosas. La encuentras en la mantequilla, el hígado, la natilla, el huevo y los lácteos enteros.
Vitamina D
Se une a un receptor específico que se puede encontrar en diferentes tejidos y en el sistema inmune. Los mejores alimentos con vitamina D son los aceites de pescado, sardina y atún, los lácteos como el queso, el yogur y la leche, el germen de trigo y los champiñones.
Hierro
La falta de hierro afecta principalmente a mujeres jóvenes y embarazadas; disminuye la multiplicación y crecimiento celular y la respuesta inmunológica. Puedes consumir el hígado, las carnes, el pescado, los huevos y los lácteos.
Zinc
Ayuda al sistema inmunitario a combatir las bacterias y virus que invaden al cuerpo. Los alimentos con mayor zinc son los mariscos, el hígado, semillas de ayote, quesos maduros, leguminosas y frutos secos, cereales completos, carnes, pescados, huevos y lácteos.
Recuerda incluir todos los grupos de alimentos en cantidades adecuadas para satisfacer las necesidades nutricionales y de esta manera vivir saludablemente. Además, acompaña tu alimentación con dormir el suficiente número de horas para favorecer el correcto funcionamiento del sistema de defensas y mantenerte físicamente bien; aprende a llevar un ritmo de vida más relajado y evitar el estrés.
Fuente: Dr. Francisco Herrera Morales, MSc. Nutrición Humana y ejecutivo de Medical Marketing