La era del internet ha estado presente en la última década en la mayoría de los hogares en el mundo. Si deseas encontrar cualquier información, la encuentras y sin importar que sea negativa o positiva.
Las tendencias cambian constantemente y los millennials se unen a ellas para tener contacto con más personas, ser el centro de atención o simplemente estar “cool” con las demás personas de su generación.
Desde encontrar videos de cómo vestirte, cómo hacer tu maleta, comprar ropa, hasta hallar la fórmula para encontrar pareja es lo que hoy en día la mayoría de millennials busca; claro, dependiendo el interés de cada uno.
Varios expertos del telemarketing han tratado de estudiar a esta generación. Ellos saben que la era digital es su principal fuente y la forma en como los jóvenes de hoy en día se conectan con el mundo. Según expertos, la fuerza laboral en 2020 estará integrada por un tercio de jóvenes y en 2025, por un 75% del total.
Cierto o no, las redes sociales son importante… ¿Pero hasta qué punto? Así como puede ser una herramienta para servir, también puede perjudicar a los millennials, ya que muchos de ellos se dejan “influenciar” por lo que aparece publicado, demeritando la misma credibilidad de sus padres.
Si está en internet es cierto
Hoy en día, algunos jóvenes han preferido hacer caso omiso a lo que sus padres les dicen y prefieren escucharlo de otras personas. “Cuando tenía 15 años entré en una etapa de rebeldía y me caía mal todo lo que mis padres me decían. Prefería hablar con personas en Facebook o ver videos de influenciadores sobre temas de mi interés”, comenta Luis Gaytán.
Investigadores de la Amsterdam School of Communication Research (ASCoR) opinan que el internet les proporciona a los adolescentes la herramienta que necesitan para abrirse y hablar de sus asuntos personales. Pero la pregunta para los padres e hijos es: ¿Será correcto contar tus cosas por medio de las redes sociales?
Algunos adolescentes prefieren aprender de los temas de su interés, por medio de otras personas y no de sus seres más cercanos. “Yo he tenido amigos que nunca han estado cerca de sus padres y buscan un refugio en otras personas. Para mí, esto es peligroso porque uno nunca sabe quién en realidad es la persona que está detrás de la pantalla. También estar haciendo caso a lo que digan los influenciadores no es del todo correcto; hay cosas que te pueden ayudar, pero otras son solo fantasía”, explica Katherine Reyes.
Si lo dice alguien que tiene más de 10 mil seguidores, es cierto. “Como padres, debemos estar consciente de que el internet es una excelente herramienta, pero a la misma vez puede ser perjudicial para una persona, emocional y psicológicamente. Nosotros debemos crear ese vínculo y no otras personas que ni siquiera conocen. Yo entiendo que hay personas que viven de inspirar a otros, ¿pero qué tan cierto o reales son ellos? Como padres, debemos estar atentos”, explica Bella Jerez, madre de familia.
El amor nadie lo comprende al cien por ciento, pero muchos son los que cuentan su experiencia en Facebook. “Yo viví una relación tóxica durante 4 años; mis amigos me mencionaban que debía alejarme de mi ex novio, pero yo no les hacía caso porque creía que el amor era así, con momentos buenos y malos. Pasaba deprimida y mis padres se dieron cuenta, no los escuchaba y estaba encerrada en mi mundo hasta que mi relación se puso violenta y tensa. Viendo videos en YouTube pude ver que sí estaba mal, mi relación no era lo que esperaba y a raíz de esos videos abrí los ojos. Mis padres y amigos ya me lo habían mencionado meses antes”, relata Adriana Ochoa.
Videos motivacionales también son tendencia hoy en día en las redes sociales. “Existen un sinfín de cosas en las redes, pero algunas son positivas. Hace poco pasaba un momento de depresión y un mi amigo me sugirió ver Mentes Brillantes. Estos videos en Facebook te inspiran a no rendirte, ver cómo piensan los millonarios y también te dan consejos para que emprendas un negocio. Creo que si uno sabe utilizar las redes, le puede sacar un buen beneficio”, resalta José Diego Mansilla.
En 2016 y 2017, la Ballena Azul fue tendencia en los medios de comunicación. El juego se trataba de una serie de desafíos, donde el último paso era el suicidio.
Phillip Budeikin, un estudiante de psicología ruso, expuso que el juego era para incitar a personas débiles de mente para que se suicidaran. El juego cobró la vida de 17 adolescentes en todo el mundo.
Momo era otro reto viral promocionado por whatsapp, el cual tenía las mismas características que la Ballena Azul, pero esta vez iba dirigido a niños.
La licenciada en psicología y directora del Centro Psicoeducar, Elizabeth González Montaner, recomienda estar atento al comportamiento de los jóvenes: “Tomar con seriedad lo que expresan los chicos, ya sea de manera verbal o no verbal. Estar atentos a las búsquedas en internet y, sobre todo, tener confianza y comunicación con los hijos, así se podrán evitar tragedias”.
¿Crees que los millennials están más influenciados por el internet que por sus propios padres?