Xajpot necesitaba inspiración para una nueva pieza musical que componía. Una mañana, llegó más temprano al Paraninfo Universitario de la Universidad de San Carlos, en donde actualmente cursa una licenciatura en música.
Sacó su grabadora y grabó el canto de los pájaros y los árboles, antes que todo el personal y los estudiantes llegaran.
“Esos sonidos aparecieron en una pieza musical, me sentí conectado con la naturaleza”, comentó.
Erick Xajpot es uno de los pocos, si no el único, compositor nacional joven. A sus 18 años, el joven pianista ya ha compuesto 12 obras propias y ha sido solista de diversos recitales en donde él es la estrella.
Xajpot viene de una familia de músicos. Tanto su abuelo, como su padre y hermano comparten una pasión por la música que transmitieron al pequeño Erick. “Mi papá fue mi primer maestro, me enseñó a tocar diversos instrumentos”, comentó.
Él también le enseñó a leer partituras en diferentes clases. Creció escuchando la música de Franz Liszt y Ludwig van Beethoven. Después de varias experiencias “traumáticas”, Erick se decidió por el piano.
“Para mantener la posición para tocar violín, me ponían una tijera, de modo que si movía el brazo me iba a cortar. También, me quisieron enseñar flauta, pero tenía asma. Es muy irónico”, agregó.
Erick es autodidacta en cuanto a música se refiere. Aprendió a tocar el piano al ver tutoriales de YouTube. Poco a poco, comenzó a identificar las notas en el teclado y el resto es historia.
Tres meses después, ingresó a estudiar al Conservatorio Nacional de Música Germán Alcántara. Tenía 12 años en ese momento.
“Pasé por todos los maestros de piano y me recomendaron ir con Silvia García, maestra titular en Francia, quien es mi actual docente. En sentido de enseñanza, tenemos lo máximo que puede haber en Guatemala”, comentó.
“Si se les enseñara a los niños desde pequeños a apreciar la música guatemalteca, clásica e internacional, creo que el arte tendría más apoyo”, mencionó.
La pasión por la música era imparable para Erick, quien se propuso aprender a componer. Su primera obra la compuso para un cuarteto de cuerdas.
“Todo surgió como una broma. Le dije a una amiga que tenía un cuarteto, que me encargara una pieza y la compuse. Tenía un poco de todo, pero mal mezclado”, explicó.
En el país, no existe un lugar en donde aprender composición. Con el apoyo de sus maestros, Erick se inscribió a un curso libre impartido por el maestro David de Gandarias, compositor titulado en el Gioachino Rossini de Italia.
“Juntos revisamos mis obras. Ya componía más formal, pero trataba de imitar estilos que me gustaban como Mozart”, agregó el pianista.
Al poco tiempo, Erick estrenó en un recital su primera obra junto a otros artistas. En mayo de 2019, presentó su primer recital con piezas propias.
El evento se promocionó días antes y contó con la participación de otros músicos.
Dedicación y pasión
De lunes a viernes, Erick asiste a la universidad. De lunes a jueves, asiste al Conservatorio. Se mueve entre su título universitario y la pasión por la música.
“Debo repartirme. Cuando tengo tiempo libre, me vengo al conservatorio a estudiar”, añadió.
Uno de los sueños que Erick ha querido cumplir desde pequeño es poder salir de Guatemala y continuar creciendo musicalmente en el extranjero. Sueña con Costa Rica y Europa.
“Quisiera buscar una beca, así como estudiar en otro país, por ejemplo, en Costa Rica, que es un muy buen lugar para que los pianistas de todo el mundo estudien y convivan”, comentó.
En Europa, Erick sueña con estudiar en Francia, un país que para el joven es un “foco de vanguardismo”. “Ahí se han estrenado muchas obras polémicas como el Rito de la Primavera de Stravinsky. En ese momento, no estaban preparados para ese tipo de música tan revolucionaria. También, es el país con la escuela más innovadora”, agregó.
Pero, el joven está consciente del tiempo. Primero debe graduarse de ambas carreras para poder aspirar a algo más grande. Mientras tanto, las puertas a recitales en donde es el protagonista se siguen abriendo.
“Hay más apoyo dentro del gremio, pero no al arte en general. Todavía quedan eruditos que aprecian mucho la música que son quienes llegan a los conciertos”, dijo.
Al sentarse y tocar las teclas del piano, Erick tiene diferentes personalidades, que dependen de lo que toca. “Cada pieza tiene lo suyo. Un Beethoven no lo voy a tocar igual que un Rajmáninov”, contó.
Su talento es considerado por el gremio como un prodigio. A su corta edad, puede componer piezas en una semana o un solo día. Además, sus piezas transmiten sentimientos que reflejan cada edad del joven.
“Hubo una época en la cual era un poco ingenuo. Mis composiciones se escuchaban como temas infantiles y poco a poco, se escuchan cómo fueron madurando”, comentó.
Influencia de los grandes
Xajpot citó entre sus influencias en composición a Beethoven y Shostakóvich. “Los compositores rusos son los que más se acercan a lo que estoy componiendo ahorita”, enfatizó.
Sin embargo, también señaló al músico guatemalteco Joaquín Orellana como una de sus máximas influencias. “Sus instrumentos me llaman la atención, especialmente la Sinfonía del Tercer Mundo”, agregó.
De sus propias piezas, la que más disfruta es una Cantata estrenada en el concierto pasado. “Es de las primeras obras que son mías, que no tiene influencia de otros lados. Tiene mi sentir”, mencionó.
Aunque detesta el reguetón, también considera importante la influencia de la música popular. En lugar de tener artistas o canciones favoritas, Erick tiene períodos en los que escucha solo jazz o rock clásico.
Gracias a estos períodos, Erick ha compuesto obras como el Esbozo sobre Vanushka, inspirado en un musical. Entre su repertorio cuenta con nocturnos y toccatinas que se pueden escuchar en recitales y en su canal de YouTube.
El próximo 19 de junio, Erick será el solista de uno de los conciertos del Ciclo de Beethoven: Nueve Sinfonías. El pianista volverá a deleitar a su público cuando presente el concierto para piano número cinco Emperador.
La cita es en el auditorio del Conservatorio Nacional a las 16:30 horas. La entrada es gratuita.
Fotos: Elena Gaytán, Conservatorio Nacional de Música.