Paola Chuc se ha convertido en la gran promesa del talento nacional. Con su participación en la competencia de canto, La Academia, ha puesto en alto a Guatemala al quedar entre los cinco mejores y a una emisión para lograr el primer lugar.
Durante varias semanas, los elogios hacia su canto no han parado. “Le han puesto las canciones más complicadas que al resto y aún así logra salir adelante”, “es impresionante su talento” o “esta chica seguro va a ganar” son los comentarios que se leen en las redes sociales cuando termina el programa cada domingo.
Sin embargo, detrás de todos los elogios, los conciertos transmitidos por la televisión, los jueces y la incertidumbre de su participación, se encuentra Staccato Singers Academy. Ubicada en la zona 9, esta escuela de artes se ha dedicado a trabajar con jóvenes que buscan perfeccionar sus habilidades musicales, actuación, baile y canto. Miguel Ángel Duarte, dramaturgo y compositor con más de 25 años de experiencia en la educación musical, se ha encargado de orientar a decenas de jóvenes que buscan trascender, entre ellos, se encuentra Paola.
“Empezó a los 9 años y estudió por 3 años y medio en la academia. Sin embargo, se retiró por varios años. Tiempo después me enteré que su partida de Staccato fue debido a la muerte de su padre. Llamé a su mamá para saber de ella y me contó que Paola estaba deprimida, ya no sonreía, que era lo que más la caracterizaba, la noticia me consternó. Estaba a punto de cumplir 15 años, entonces le regalé una beca para que continuara en nuestra escuela”, afirmó Miguel.
Los talentos escondidos
“Ella ha trabajado muchos estilos y maneras de cantar diferente. No importa qué canción le pongan, Paola ha logrado sobresalir”, aseguró Miguel sobre sus diferentes capacidades en el escenario. Para su maestro, una de sus principales características vocales es su timbre trabajado. “Hay personas que puedes ponerlas a cantar y no se diferencian. Paola, en cambio, tiene brillo y es fácil de identificar. Asimismo, tiene un espectacular oído armónico”.
Además, la disposición de Paola para aprender y mejorar le han ayudado a mantener una gran seguridad en su voz. “No negaba asistir a diferentes eventos de canto para aprender y conseguir nuevas experiencias”, comentó Miguel.
“Paola tiene la capacidad de cantar muy bien en otros idiomas. En nuestra academia le he exigido que practique el español, ya que suele cantar mucho en inglés, italiano, incluso latín. Estamos seguros que le pueden poner lo que sea, ella igual destacará”, indicó Duarte.
Una escuela para trascender en el arte
La institución es un lugar dedicado al entrenamiento y trabajo intensivo sobre las bellas artes. Sin limitarse a un género o talento, Miguel y Staccato se han vuelto en una de las escuelas de entrenamiento artístico más importantes del país.
“Somos una escuela de alto rendimiento de artes escénicas y donde nuestro fuerte es el canto. Trabajamos baile y actuación en conjunto. Utilizamos las obras de teatros para que puedan exponerse en el país. Nosotros no descartamos a nadie. Según mi experiencia en la enseñanza musical, estoy seguro que cualquiera puede lograr cantar, solo es necesario tener dedicación y metas claras”, expresó el maestro sobre los labores de Staccato.
Actualmente, la escuela cuenta con 42 alumnos, con historias y objetivos diferentes, pero con el mismo sueño de poder explotar sus talentos. Miguel comentó que la música logra cambiar vidas, mejora el estado de ánimo y el rendimiento académico en el colegio o la universidad. “Algunos vienen aquí simplemente porque les gusta cantar o tocar algún instrumento. Sin embargo, cuando se involucran en la música, se encuentran a ellos mismos. Hay personas que vienen a la escuela con asignaturas perdidas, pero cuando ven lo que pueden conseguir con su voz, mejoran en su entorno familiar, de amigos y estudios”.
Miguel también comentó de la importancia de las artes en la vida y los estudios. “Los padres están equivocados con respecto a la música. Muchos creen que con la carrera moriremos de hambre. Pero, un joven que se dedica a ella mejora todo en su vida.
“Un buen padre siempre quiere que su hijo sea feliz. Así que si es músico, lo peor que puede hacer es alejarlo de la música”, finalizó Miguel.
¿Crees que es importante la educación y el entrenamiento en el canto?