Guatemala, un país donde la mística y la cultura se encuentran a la perfección gracias a sus leyendas que cualquier padre cuenta a sus hijos para asustar o fascinar, también puede crear un choque con la realidad.
Sin embargo, el miedo también puede llevar a algunos a hacer locuras, más con los recuerdos de las leyendas persiguiendo la cabeza. Entre ellos, los animales como protagonistas de mitos, como los portadores de la muerte que ha llevado a unos al maltrato animal para evitarla.
Los ojos más inquietantes
Una noche de remodelación para Jorge, quien reside en Santa Rosa, le suponía trasladar cosas de un cuarto a otro mientras los miembros de su familia dormían en pisos superiores del hogar. “Justo ese día, mi esposa estaba hospitalizada y me tocó estar solo en el cuarto. Solamente estaba mi tío en casa. Cerca de las 11 de la noche, escuché algo parecido a un grito y sentí que me cayó algo en la cabeza”.
La hora en que sucedió y la oscuridad de su casa le provocó escalofríos para luego salir del lugar inmediatamente. Tras encender varias luces, no encontraba qué pudo haber creado tal sonido y darle un golpe en la cabeza. Con un palo de escoba y con temor recorrió las habitaciones, hasta que se topó con una lechuza que permanecía tranquila sobre un estante.
“Cuando la vi, solo me quedé sorprendido y justo después brincó hacia mí con las alas abiertas. Salí corriendo y fui a llamar a mi tío que estaba cerca de mi en la casa. La lechuza se quedó en la cama por horas y solo miraba fijamente nuestros movimientos”, comentó Jorge.
Los recuerdos de los mitos revivieron con el paso de los minutos y con la lechuza presente. El tío de Jorge, nervioso, no paraba de contar sus experiencias paranormales. “Dicen que cuando se aparece un búho o escuchas sus gritos es porque alguien morirá. También relatan que la presencia de estos animales es la del espíritu de alguien”, repetía y al mismo tiempo lanzó agua bendita para calmar la situación.
Para sorpresa de ambos y tras recibir sobre su plumaje las gotas de agua bendecida por un cura, la lechuza se marchó tranquila por una ventana.
Los rumores también vuelan
Los gritos nocturnos llamaron la atención de todos en el pueblo, quienes preguntaron en los días siguientes sobre lo sucedido. Jorge aclaró sus dudas y la historia de la lechuza parecía atormentar a varios.
“Muchos me decían la misma leyenda y me aconsejaban matarla antes que lo hiciera con nosotros. La gente tuvo tanto miedo como mi tío y hasta usaban caminos alternos para no pasar frente a mi casa. Un amigo me dijo que hay lechuzas buenas y malas, tal vez porque no le intenté hacer daño se fue”, afirmó Jorge.
Ahora pasa los días escuchando los comentarios de los vecinos. Algunos incluso buscan al animal para terminar con los demonios que trae. La lechuza debe huir de un pueblo entero.
¿Corría peligro?
La especie con la que Jorge se topó es una Ciccaba Virgata, mejor conocida como búho café. Esta se encuentra en sectores montañosos y con cuerpos de agua cercanos. Es común en sectores de México, Guatemala, Panamá, Colombia y Venezuela. Esta especie no corre peligro de extinción. Sin embargo, su caza está penada de uno a cinco años de prisión según el código penal y podría ser aún más grave si es en un área protegida.
Varias especies corren el mismo riesgo, ya que la leyenda aconseja el sacrificio de algunos animales como las mariposas negras (Ascalapha odorata).
Bien dice el antiguo refrán “cuando el tecolote canta, el indio muere”, pero corre más riesgo una lechuza de la destructividad del hombre que lo que pueda provocar una leyenda.
¿Qué otros animales crees que son considerados de mala suerte o que traen la muerte?