Los cosplayer son así. Invierten en el traje, pupilentes, peluca y maquillaje para poder interpretar de la mejor manera a su personaje favorito. Es una inversión que no se recupera, pero que al final ellos terminan satisfechos de los resultados.
A todo esto, ¿sabes qué es un cosplayer?
Si crees que es solamente vestirse de un personaje, estás equivocado. La idea es representarlo, darle vida al usar el traje y todos los elementos que se requieren para mostrar su verdadera esencia.
Este término es usado mayormente dentro de la cultura de ánime, en la cual las personas compran o hacen sus trajes sobre su personaje favorito; lo lleva a las convenciones para mostrarlo interpretando también la actitud. Las convenciones de superhéroes o de videojuegos tampoco se quedan atrás, así como películas como Star Wars, Avengers o X-Man.
No, no es por fama, es simplemente porque les gusta.
Y como se ha mencionado, es una inversión que no se recupera tanto en lo monetario como en el tiempo.
Andy Yuman ha hecho cosplay desde hace aproximadamente 10 años. No compra ni manda a hacer sus trajes sino que prefiere confeccionarlos por sí solo, a mano y sin máquina. “Me gustan distintos personajes, pero meterse en el verdadero papel es lo que más importa. Más allá del traje, la esencia del mismo debe notarse siempre”, aclara.
Él también practica las voces, sus movimientos y el comportamiento para realizarlo lo más parecido posible. “En lo más que he invertido es Q400 haciéndolo yo mismo, de aproximadamente tres a cuatro meses de trabajo”, señala el cosplayer.
Otro personaje bastante conocido entre cosplayers es Kiefer García, de 29 años, que ha invertido también en sus trajes; por lo general hace genderbend, que son versiones masculinas de personajes femeninos. Por la complejidad de sus trajes, el más caro al que le ha invertido ha sido de Q2 mil aproximadamente.
“He tenido la oportunidad de viajar a países como invitado en convenciones: Colombia, Honduras, El Salvador y a México”, indica Kiefer.
El cosplay es bastante mencionado en muchos lugares como convenciones o festivales de ánime, cómics, películas o libros. Han tomado gran importancia, puesto que en un buen cosplay, se puede determinar que la inversión es bastante alta y con dedicación.