El universo de Star Wars es prácticamente interminable. Cada película resalta un nuevo planeta con un ambiente diferente al resto. Bosques, selvas, mares interminables e islas ocupadas únicamente por una base imperial, rebelde, entre otros.
Sin embargo, en algún lugar se deben de grabar. Lugares inimaginables que son usados como sets y escenarios para alguna escena de las películas. Sin importar el clima, dificultad para grabar o la misma ley de un país, Lucasfilm y la saga galáctica ha salido adelante para crear sus películas.
Algunos de los escenarios son impresionantes y abiertos al público. No sería una mala idea llegar y recrear alguna de tus escenas favoritas de las películas.
Tatooine: Túnez
Por tan solo US$10 puedes quedarte una noche en el mismísimo hogar de Luke Skywalker. El Sidi Driss Hotel te regala el mismo escenario que se usó en el Episodio IV: Una nueva esperanza.
Muy cerca de los lugares más desérticos de Túnez, el hotel ha tratado de mantener la imagen de los vestigios que dejó la grabación de la película en 1977. Puede que no llegues a ver dos soles en el horizonte, pero será una gran experiencia.
Yavin IV: Guatemala
No podíamos dejar a nuestra querida Guatemala de nuestra lista, ya que fue un set importante para la saga completa. El Parque Nacional de Tikal, ubicado en Petén, sirvió también para el Episodio IV, siendo este una importante base rebelde.
El Templo IV y el Gran Jaguar sirvieron para crear uno de los horizontes más emblemáticos con las pirámides sobresaliendo de la selva y el Halcón Milenario llegando a la base. Hoy, aún puedes subir dicho templo y contemplar la misma vista que se usó en aquel entonces.
Skellig Michael: Irlanda
El lugar donde Luke se ocultó por años. Esta misteriosa isla que aparece en los últimos dos episodios de la Saga mantiene una curiosa historia muy relacionada a lo que representa en las películas.
Este patrimonio de la humanidad (nombrado así desde 1996 por la UNESCO) fue un antiguo monasterio por más de seis siglos. Claro, para Luke era el primer templo Jedi, pero no se aleja mucho de la historia. La isla conserva varias chozas de piedra por distintos lugares y un largo camino que recorre las curvas de esta isla.
Scarif: Maldivas
Rogue One, el spin off de Star Wars, que terminó como un éxito taquillero en todo el mundo, tuvo la peculiaridad de usar varios sets al antiguo estilo del cine, dejando atrás a la pantalla verde. Reacondicionando una de las estaciones del Subterráneo de Londres o grabar en el desierto de Jordania son un ejemplo. Entre ellos resaltó la isla de Laamu Atoll de Maldivas.
Un destino paradisíaco con agua cristalina y playas blancas. Varios tours ofrecen la experiencia completa de pasar justo en la isla donde se grabaron las escenas más emocionantes de Rogue One. Un destino que puede quedar en tu lista de “Qué hacer”.
Cercanos o lejanos, no dejan de ser impresionantes locaciones para grabar películas y viajar, un deleite para los ojos. ¿Te animarías a un “tour galáctico”?
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