Corría el 10 de agosto de 1995, cuando tras varios meses de agonía el corazón de mamá dejó de latir. La hora consignada en el certificado de defunción fue a las 15:30, pero yo sé que su último suspiro lo emitió a las 15:25. Ella fue diagnosticada con cáncer de mama, pero la enfermedad hizo metástasis y se extendió primero por su pelvis y después por todos sus huesos.
Los últimos meses de su padecimiento fueron de pesadilla, pues ni las dosis elevadas de morfina podían calmar su dolor. Aun con eso, su partida fue en extremo dolorosa y casi 24 años después su recuerdo aún me humedece las mejillas y su ausencia es profunda e infinita.
Saco esto a colación en el marco del Día Mundial contra el Cáncer, el cual se conmemoró ayer. Estadísticas de Globocan, un proyecto de salud de la International Agency for Research on Cancer, da cuenta que para 2018 se registraban 18.1 millones de nuevos casos de cáncer en el mundo y que 9.6 millones de personas fallecieron por esta enfermedad.
En Guatemala
En el país, de acuerdo con el perfil oncológico de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de 2014, de los 80 mil decesos registrados, 9 mil 700 fueron a consecuencia del cáncer: 5 mil 200 mujeres y 4 mil 500 hombres.
En pacientes hombres, el cáncer de próstata fue el más fatal y representó un 24 por ciento de los decesos, seguido del cáncer gástrico; con 22.1 por ciento; hígado, 15.5 por ciento; y pulmón, con 7.3 por ciento, entre otros. En mujeres, el cáncer gástrico fue el más mortal, con 20.9 por ciento; le sigue el de hígado, 14.3 por ciento; cervical, 12.3 por ciento, entre otros. El perfil de la OMS evalúa a pacientes con ingresos medios y bajos.
De acuerdo con el Instituto de Cancerología (Incan), cada año se registran en el país alrededor de 3 mil 500 casos nuevos, para lo que se destinan aproximadamente Q85 millones anuales de presupuesto. Cada año se atienden a unos 80 mil pacientes.
En este día es importante hacer un llamado a reducir aquellos factores de riesgo que se pueden relacionar con esta enfermedad, tales como tabaquismo, consumo excesivo de alcohol, obesidad, exposición al asbesto, contaminación ambiental, entre otros factores. Es imperativo realizar chequeos constantes con médicos especialistas y estar alertas a la aparición de síntomas poco usuales en nuestra cotidianidad. Y usted, ¿qué hace para prevenir el cáncer?