¿Viajar con tu mascota es inofensivo? imagen

Las verdaderas repercusiones que existen detrás del viajar con tu mascota como si fuera un soporte emocional.

Las opiniones e imágenes de este artículo son responsabilidad directa de su autor.

La historia de Adriana

Adriana es una joven de 23 años, que desde que tiene memoria ha tenido fobia de los perros. Recuerda que desde muy pequeña le teme a estos animales, cada vez que uno se le acerca ella tiembla mucho, se pone sumamente nerviosa, se le quiebra la voz e incluso se pone a llorar. Tiene la creencia de que un perro la va a atacar y le va a hacer daño, sin importar su tamaño o raza, se altera mucho al verlos e incluso al tener que hablar de ellos. Fue un reto para ella el tener que contarme esta historia. Para Adriana viajar es diferente que para todos nosotros, los aeropuertos “son la cosa más horrible”, ya que en ellos puede haber perros entrenados para acercarse a ella y olfatear si trae algo ilegal en su equipaje. Sin embargo, en su último viaje, la experiencia que tuvo fue mucho más caótica. Al subirse al avión de una conexión en Estados Unidos, ocupó el asiento que decía su pasaje, el del pasillo. No obstante, cuando al sentarse vio a un pasajero entrar con un Pastor Alemán a su lado, sin correa ni manera de restringirlo. El hombre no era ciego, no era discapacitado y el perro estaba cumpliendo la función de lo que conocemos como Animal de Soporte Emocional. Sin embargo, Adriana comenta que el hombre se veía muy tranquilo durante todo el vuelo. Por su creciente ansiedad, tuvo que cambiar de lugar a la ventana y explicarles a sus compañeros de viaje de su terrible fobia. Describe el vuelo como el “peor en el que ha estado”, lloró, tembló y no podía parar de observar al perro en guardia de que este no fuera a atacarla. El sufrimiento que Adriana sintió ese día fue realmente severo, desde este día se le dificulta más viajar y ni siquiera piensa poner un pie en países en donde la seguridad canina es fuerte, como Colombia. Así como ella, existen miles de personas alrededor del mundo que sufren de fobia específica a los perros o cynophobia para los cuales, el viajar se vuelve cada vez un reto más grande.




Pero entonces, ¿Cuál es el problema? 

El mundo se orienta cada vez más a uno en donde las mascotas son parte muy importante en la vida de sus dueños. Cada vez más personas compran perros y buscan llevarlos con ellos a todos lados. Yo soy una de estas personas. Los lugares públicos son cada vez más Pet Friendly y podemos hacer muchas más cosas con nuestros cachorros de las que podíamos hacer hace unos años. Sin embargo, existe un problema creciente en el ámbito del transporte aéreo que ha causado que varias personas se vean afectadas por nuestra necesidad de no separarnos de nuestras mascotas. Desde hace tiempo, se permite que las personas se lleven a sus mascotas de viaje, cuando estas van en compartimientos separados para no afectar a los otros pasajeros. A pesar de esto, recientemente, son muchos más perros los que viajan en el mismo lugar que sus dueños, dentro del avión, encima de sus piernas e incluso libres en el pasillo.

Para esto es necesario diferenciar entre los dos tipos de perros que podemos encontrar dentro de un avión. Existen los Animales de Servicio y los Animales de Soporte Emocional, los primeros son perros entrenados para ayudar a personas con discapacidades, deben pasar por un rígido entrenamiento y ser aprobados por la Asociación de Animales de Servicio de cada país. Son requeridos por sujetos con discapacidades físicas como ceguera y sus dueños los necesitan casi en todo momento. Por otro lado, los segundos, son las mascotas personales de individuos que sufren de un trastorno de Ansiedad que sea diagnosticable en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Desórdenes Mentales (DSM-V). El verdadero conflicto radica en que actualmente, muchas personas buscan falsificar el permiso de un profesional de la salud para llevar un Animal de Soporte Emocional en el avión con ellos. Varios creen que “su amigo o familiar psicólogo” puede hacerles una carta que les permita viajar con su amada mascota, pensando que esto es algo inofensivo.



Dog Travel Company

La historia de Adriana demuestra lo contrario, el falsificar un diagnóstico Ansioso o Emocional del DSM-V, es algo altamente reprensible para el profesional de la salud mental que emite la carta. Puede incluso llevarlo a perder su licencia y/o número de colegiado. Sin embargo, la consecuencia más seria en mi opinión es que muy pronto las líneas aéreas se darán cuenta del abuso en el sistema de Animales de Soporte Emocional que existe en sus aviones, ya que la prevalencia de trastornos mentales no coincide con la cantidad de personas que dicen tenerlos y como el hombre de la historia, se encuentran en perfectas condiciones durante el vuelo. Esto no solo puede llegar a afectar a personas que sí sufren de un trastorno diagnosticado de Ansiedad, que pueden perder su única fuente de tranquilidad durante un vuelo, sino a personas como Adriana, quienes cada vez encuentran más dificultad en poder viajar de un país a otro. Es importante que por más significativas que sean nuestras mascotas para nosotros, aprendamos a respetar este sistema, ya que las repercusiones que estas acciones tienen en los demás pueden ser sumamente dañinas. Nunca sabemos realmente como lo que hacemos puede afectar a otro, pero una vez tomamos conciencia, debemos aprender a empatizar con los demás, y tú, ¿qué piensas?

Todas las noticias, directamente a tu correo

Recibe todas las noticias destacadas de Relato.gt, una vez por semana, 0 spam.

¿Tienes un Relato por contar y quieres que nosotros lo hagamos por tí?

Haz click aquí
Comparte
Comparte