La crisis sanitaria del COVID-19 en Guatemala está causando daños al sector comercial. Las medidas del gobierno no han funcionado tal y como se esperaba. El cierre de empresas ha sido eminente y el sector privado ha indicado que al no reabrir la economía los efectos de estas acciones no tendrán precedentes.
La Cámara de Comercio realizó un estudio de opinión del 2 al 9 de julio, en el que participaron 1,186 empresarios de todo el país de distintos sectores de comercio, servicios, industria y agro, que se han visto afectados desde hace 3 meses por la pandemia.
El estudio reveló que más del 40 por ciento de las empresas ha reducido sus ventas, que ha causado un impacto significativo de las operaciones y en el flujo de efectivo para cumplir con los compromisos.
Se estima que 6 de cada 10 empresas podrán quebrar si la situación continúa y no se reabre la economía. El presidente del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF), Nils Leporowski, menciona que al seguir así se perderán aproximadamente 400 mil empleos.
En el caso de los restaurantes reportaron que el 83 por ciento han mantenido un nivel de operación durante la pandemia por medio del servicio a domicilio y para llevar. Aunque los comercios en los centros comerciales permanecen cerrados, donde el 43 por ciento enfrenta problemas para el pago de alquiler y mantenerse.
Edwin Asturias, director de la Comisión Presidencial de Atención a la Emergencia COVID-19 (Coprecovid), ha sido una de las personas que no concuerda con el CACIF sobre los modelos que han utilizado para medir el impacto económico de las empresas durante la crisis, en el que se estimó que se han perdido aproximadamente US$2 mil 101 millones.
Asimismo, el expresidente del CACIF, Juan Carlos Tefel, le respondió a Asturias que el modelo económico utilizó datos oficiales, en el cual le dejó ver que su crítica no contaba con fundamentos.
El modelo económico evidenció las pérdidas que se obtienen a diario si no se reapertura la economía en el país. Leporowski indicó que se están trabajando protocolos de bioseguridad para que las empresas estén listas al momento de abrir nuevamente, en el que 9 de cada 10 empresarios ya se encuentran preparados para abrir los negocios.
“Se está trabajando una guía para implementación y autorregulación de las empresas, también se trabaja una campaña de información para que los trabajadores sean conscientes de todos los efectos, prevenir y no solo en la empresa, sino que en sus rutas. Nosotros creemos que la apertura se debe hacer lo antes posible, cada día que pasa se pierden empleos”, explicó Leporowski.
El gobierno deberá tomar acciones inmediatas para reabrir la economía en Guatemala, ya que cada día es un daño que se está haciendo al comercio.