Una familia de escasos recursos estaba festejando la Navidad; a medianoche se dieron los abrazos y salieron a observar los cohetes y las luces. Su perrita, “Mini”, salió con ellos, pero uno de sus vecinos se aprovechó y le lanzó un dulce, por lo que el inocente animalito se acercó al hombre y luego este la agarró. Desalmadamente le colocó un mortero en su trompita; la familia trató de ir a rescatarla, pero ya era tarde porque el mortero explotó rápidamente.
“Mini” está embarazada
Mientras tanto, “Huellitas de la Calle” ha rescatado a la perrita; pese a tener el dolor por la reciente muerte de “Sam”, no dudaron en correr a ayudar a la familia afectada.
“Mini” está luchando por su vida. Ya le hicieron la primera cirugía, de la cual salió bien, pues su hocico estaba totalmente fracturado y con una hemorragia severa, producto de las quemaduras y la explosión.
Ella necesita varios medicamentos y ayuda para poder recuperarse. Algunos de los fármacos que requiere son:
También puedes hacer tu aporte económico para que “Mini” pueda tener lo que necesita.
El responsable de la crueldad
En redes sociales, “Huellitas de la Calle” ha evidenciado a un responsable de la crueldad contra “Mini”. El vecino es de San José Pinula y se llama Hugo Banchez, quien aparentemente fue quien llamó a la perrita y con engaños le colocó el artefacto explosivo en su boca.
Sed de justicia
En redes sociales se ha viralizado la imagen de Hugo Banchez, con la consigna de pedirle a las autoridades que lo detengan y que pague con cárcel lo que hizo con el indefenso animalito.
Según el abogado Carlos Hernández, el hombre podría enfrentar la pena máxima contra el maltrato animal.
“Lo menos que podría decir es que a este individuo se le debería hacer lo mismo, pero no es posible; lo que sí es que podría llegar a pagar hasta 12 salarios mínimos, pero eso no es suficiente para que un psicópata de ese tipo se pueda enmendar con la sociedad y con la vida de Mini”. – Carlos Hernández, abogado.
Hasta el momento las autoridades de protección y bienestar animal no han capturado al supuesto responsable y tampoco se ha evidenciado que este vaya a ser apresado, pues los encargados no han mostrado algún interés en detener estas atrocidades.